Trabajo pone en marcha las 4.038 jubilaciones de Izar
El Ministerio de Trabajo ya conoce los detalles de la reestructuración acordada por la SEPI y los sindicatos. El expediente de regulación de empleo remitido a las autoridades contempla finalmente la prejubilación de 4.038 empleados, la mitad de ellos en Fene, Ferrol y Puerto Real.
La nueva Izar, que se centrará en la industria militar, dará empleo de esta manera a 5.533 personas en los centros de Ferrol, Fene, Cartagena, Puerto Real, San Fernando y Cádiz, además del centro corporativo ubicado en Madrid, según el proyecto de regulación de empleo presentado el 23 de diciembre al departamento que dirige Jesús Caldera.
La presentación de este documento pone en marcha formalmente el proceso de reestructuración. El siguiente paso será abrir un período de consultas con los representantes legales de los trabajadores. No obstante, este expediente fue consensuado entre la SEPI y los sindicatos, por lo que no se prevén reclamaciones.
Una vez superado este trámite, el ministerio podrá dar el visto bueno o rechazar el plan. También habrá que salvar el escollo de Bruselas, que ha expresado sus dudas acerca del proyecto. Así, el ministro de Economía, Pedro Solbes, se reunirá en enero con la comisaria de Competencia, Neelie Kroes para convencerla de que el plan se ajusta a las normas de la CE. Este pacto contempla, además de las 4.038 prejubilaciones, la concentración de toda la actividad militar en una nueva sociedad, actualmente denominada NewIzar, que operará a partir del 1 de enero. El resto, se intentará vender de forma ordenada. Una vez segregada la actividad militar, y dentro del mismo se cumplirá con la decisión de devolución de las ayudas declaradas incompatibles por la CE, unos 1.200 millones incluidos intereses.
El documento presentado a Trabajo establece también en qué centros y en qué cuantía se llevarán a cabo estas prejubilaciones. En términos absolutos, las más afectadas serán las instalaciones de Ferrol, Fene y Puerto Real, cuyas plantillas menguarán, en conjunto, en 2.027 personas. Fene, en concreto, perderá el 66,2% de su masa laboral. Los centros que quedarán fuera de la nueva compañía y cuyo accionariado se abrirá al capital privado, tampoco quedarán fuera de las reestructuraciones. Así, las instalaciones en Manises perderán hasta el 55,8% de sus trabajadores. La plantilla en Gijón disminuirá en 393 personas, con un recorte del 56,5%.
La medida afectará a todos los trabajadores nacidos antes del 31 de diciembre de 1952 y que tengan una antigüedad mínima reconocida de 10 años en dicha fecha. Todos estos empleados tienen garantizado, según el expediente presentado a Trabajo, hasta que cumplan los 65 años el 76% del salario bruto, lo que en la práctica supone más del 85% del sueldo neto. Una vez alcancen los 65 años los trabajadores accederán a la jubilación ordinaria.
Los astilleros cerrarán en 2004 su peor año
El último de los cuatro años y medio de vida de Izar será el peor de todos, según la documentación remitida al Ministerio de Trabajo el jueves. Sólo hasta noviembre, la empresa acumuló pérdidas por valor de 172,4 millones de euros, casi seis veces más que durante todo el ejercicio 2003. Estas pérdidas durante los once primeros meses del año superan incluso en un 20% las previsiones que la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales había realizado en junio para todo el 2004.El holding público de astilleros, morirá así con el año después de haber obtenido resultados negativos de al menos 652 millones desde que naciese el 28 de julio de 2000. Y eso que el plan trazado en el momento de su creación contemplaba la entrada en beneficios a partir del tercer año tras la fusión. Es decir, en 2003.Estos malos resultados han venido provocados por la competencia de los astilleros asiáticos. De hecho, la actividad en los centros ha sido prácticamente nula desde el año 2000, cuando se cerró el último contrato importante: la construcción de dos gaseros en Puerto Real y en Sestao para la naviera Fernández Tapias y el armador Knutsen.La cartera de pedidos de la construcción civil ascendió en 2001 a 1.543 millones de euros. Esta cifra ha descendido drásticamente hasta los 61 millones estimados para este año. Mientras, en la parte militar se superarán este año 3.500 millones en pedidos.