Los sindicatos de Izar rompen las negociaciones y convocan nuevas protestas
Los sindicatos con representación en Izar han dado por rota la "interlocución" con la SEPI y convocaron nuevas movilizaciones tras ser informados por el grupo público de que la Comisión Europea no acepta el principio de acuerdo alcanzado por las dos partes el pasado 19 de octubre.
Los sindicatos consideran que la SEPI ha vuelto a la posición del 7 de septiembre, por lo que exigen la intervención "directa" del Gobierno en la solución del conflicto, según ha indicado el representante de CC OO, Felipe López. Los representantes sindicales no rompen las negociaciones sobre el futuro de Izar, pero consideran que la SEPI "no es el interlocutor válido a partir de este momento".
Las centrales han convocado un primer paro de dos horas para el próximo jueves día 25, aunque analizarán la posibilidad de movilizaciones adicionales en una reunión previa.
El presidente de la SEPI, Enrique Martínez Robles, ha subrayado que el problema de los astilleros públicos debe resolverse "dentro de los límites" que marca la normativa comunitaria y pidió a los sindicatos "un esfuerzo de realidad". En este sentido, ha recordado que, según los acuerdos del pasado 23 de septiembre, la estructura de la nueva sociedad será la acordada por las partes "dentro del marco comunitario".
Martínez Robles ha advertido de que la segregación de los astilleros militares debe abordarse "rápidamente", porque Izar entrará en causa de disolución el próximo 31 de diciembre.
Antes de entrar en la reunión con la SEPI, los representantes de los trabajadores advertían de que no admitirán que la SEPI se escudase en la posición del Ejecutivo Comunitario sobre los astilleros españoles para incumplir el acuerdo pactado entre las partes sobre el futuro de la empresa los pasados 23 de septiembre y 19 de octubre.
"Dudas" de Bruselas
La Comisión Europea alberga "dudas" sobre la presencia de capital público en los astilleros civiles prevista en el plan de salvamento de Izar, al entender que podría dar cobertura a nuevas inyecciones de capital público en el grupo, según fuentes comunitarias.
El principio de acuerdo entre la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y los sindicatos, alcanzado el pasado 19 de octubre, implica que la empresa pública mantenga el 49% del capital de la futura empresa de construcción naval civil segregada de Izar, y ofrezca a las cajas de ahorro al menos un 21%.
La Comisión, que ha reclamado a Izar la devolución de varios tramos de ayudas públicas posteriores a 1997 (1.200 millones de euros, incluidos los intereses), exige como condición para aprobar el plan de salvamento que no haya nuevas ayudas a funcionamiento de los astilleros civiles. Bruselas sólo tolerará ayudas ligadas a la financiación de las eventuales prejubilaciones y a paliar los costes sociales derivados de la reestructuración.
Bruselas no cuestionará en principio la estructura del capital de la empresa dedicada a la construcción militar, ya que este área no esta sujeta a las reglas europeas sobre ayudas de Estado.
Encierros en La Naval
Como medido de presión, los trabajadores de la Naval se encerraron en el astillero a la espera de la reunión entre los sindicatos y la SEPI. Los empleados esperaban que, tras un paréntesis de 15 días desde la última reunión, se hayan realizado las consultas necesarias y se presente un plan industrial para los astilleros civiles.
El encuentro de la SEPI en Bruselas había sido concertado para permitir al Ejecutivo comunitario evaluar los últimos términos del plan para el salvamento del grupo negociado por la SEPI y los sindicatos, con el objetivo de determinar si se ajustan o no a las reglas comunitarias de Competencia.