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CincoSentidos

Viviendas adaptadas para sus moradores

Como en casa, en ningún sitio. Y es que adaptar la vivienda donde reside una persona de la tercera edad o discapacitada es una opción cada vez más frecuente, fácil y económica. Al calor de esta demanda, en los últimos años han surgido empresas privadas y entidades públicas que están volcadas en la elaboración de proyectos de adaptación de pisos y, también, de otros edificios muy frecuentados por la tercera edad y discapacitados.

Hay alternativas para todos los gustos y precios, para todos los bolsillos. Según señalan en el sector, el coste mínimo de una reforma de este tipo puede oscilar entre los 2.400 y 8.000 euros, dependiendo del grado de transformación necesaria. No obstante, los precios pueden elevarse considerablemente si la reforma es más integral y requiere introducir algún tipo de automatismo domótico.

La medida más básica que incluyen los proyectos de reforma es la eliminación de barreras arquitectónicas en el baño, consistente, principalmente, en la sustitución de la bañera por un plato de ducha enrasado (sin bordillo) para posibilitar la entrada de silla de ruedas o sillas especiales para el baño.

Otros puntos importantes son la instalación de mamparas dependencia, que, al ser más bajas, permiten al familiar asear al discapacitado desde arriba; así como ampliar el marco de la puerta, que suele ser más estrecho. Sin olvidar la colocación de un sistema de asideros, barras de sujeción en el baño y pasamanos en los pasillos para facilitar el desplazamiento.

Víctor Vicente, director de Marketing de Mundo Dependencia, empresa que nació en 1999 y realiza 600 proyectos al año, indica que el 80% de las adaptaciones geriátricas que realizan responden a reformas básicas en el baño. Estos datos no sorprenden teniendo en cuenta que, según un estudio elaborado por el Centro Estatal de Autonomía Personal y Ayudas Técnicas (Ceapat), entre 500 edificios de nueva construcción, el 96% de ellos tienen problemas de accesibilidad, sobre todo en el baño.

Solventar este problema, a juicio de Cristina Rodríguez, directora de este centro dependiente del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, sólo incrementaría el precio de la vivienda menos de un 3%. 'Dichos problemas de accesibilidad son provocados porque el código técnico de edificación, que depende del Ministerio de la Vivienda, no incluye aún la accesibilidad como una obligación', resalta Rodríguez. Las posibilidades de reforma de una vivienda para hacer más cómoda la vida cotidiana a sus moradores mayores son múltiples: desde instalación de plataformas salva escaleras eléctricas; cocinas adaptadas con automatismos que suben y bajan las encimeras, lavabos regulables que permiten su uso desde silla de ruedas hasta espejos que se reclinan para que el mayor pueda verse cómodamente, hasta puertas automáticas que se abren accionando un botón, además de todo tipo de elementos domóticos para el control de persianas, aire acondicionado, calefacción, toldos, luces, etc.

Son los terapeutas ocupacionales los que visitan la vivienda y valoran las necesidades, que se incluirán en el proyecto de reforma que elabora el arquitecto.

Alternativas públicas o privadas

Varias son las fórmulas que tienen los interesados en acceder a un proyecto de eliminación de barreras arquitectónicas. Por ejemplo, en el Centro Estatal de Autonomía Personal y Ayudas Técnicas (Ceapat) se asesora y realizan proyectos gratuitos para particulares, con la condición de que la petición venga a través de alguna asociación o entidad pública (ayuntamiento, asociación de enfermos de alzheimer, etc.). Además informan sobre las subvenciones que comunidades, ayuntamientos y oficinas comarcales destinan a tal fin.De los 300 proyectos que Ceapat realiza al año, sólo el 25% se dirige a particulares. El resto lo absorben entidades tanto públicas como privadas. Desde La Tienda del Abuelo, que cuenta con 14 establecimientos, también se desarrollan proyectos y planos gratis, aunque la venta de los elementos necesarios y su implantación sea su negocio. Por su parte, Mundo Dependencia elabora proyectos y dispone de cuatro tiendas de ayudas técnicas. Desde sus tiendas presta asesoramiento gratuito a particulares y aplica precios especiales a colectivos, ONG, etc. Vía Libre, centrada en la adaptación de edificios municipales hacen proyectos o, bien, presupuestos económicos para particulares. Para realizar las obras cuentan con una empresa colaboradora.

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