Bancaja y Cajasur apoyan una oferta por Corsán
Bancaja y Cajasur financian una oferta de la inmobiliaria Somersen para comprar CorsánCorviam. La firma andaluza ofrece 350 millones, con la idea de crear una empresa con ventas de 1.560 millones.
Cuarta oferta sobre la mesa por CorsánCorviam, y puede que no sea la última. La venta-subasta que han puesto en marca los accionistas de la constructora tiene un nuevo protagonista, el grupo inmobiliario andaluz Somersen, propiedad de Bernardo Martín, que entra en liza frente a las propuestas de compra de Dinamia, Isolux y Constructora San José.
Somersen ha ofrecido 350 millones por CorsánCorviam, con el apoyo financiero de Bancaja y Cajasur, según explica Martín. Esta cifra supera las ofrecidas hasta la semana pasada por sus tres rivales.
Martín incluye en su propuesta el mantenimiento del equipo directivo de Corsán, encabezado por el consejero delegado, Carlos Puente, a quien considera piedra angular del importante desarrollo que ha experimentado la constructora en los últimos años.
Respecto a los plazos de pago, un asunto que puede ser clave para determinar el ganador de la subasta, Somersen se ha comprometido por escrito a entregar una señal de 28 millones y pagar el resto en un plazo de 30 días, en cuanto se haya producido el visto bueno a la transacción de las autoridades de la competencia, según Martín.
En cuanto al plan de negocio, la propuesta de la inmobiliaria se articula a través de un documento estratégico para Corsán a cinco años vista. Al final de este periodo, tras la fusión inmediata de ambas empresas, el grupo debería alcanzar unas ventas de 1.560 millones, un Ebitda de 221 millones, y un beneficio neto de 91. Al mismo tiempo, Somersen prevé una amplia diversificación del grupo, que hoy día centra el 90% de su negocio en la construcción. En ese horizonte, el 50% debería provenir de este campo, el 25% de los servicios y las concesiones y el otro 25% de la promoción inmobiliaria.
El resultado antes de impuestos de la empresa resultante, por contra, se vería afectado al inicio de la integración por la carga financiera que tendrá que asumir Somersen para cerrar la operación. Así el beneficio bruto se situaría en 2005 en 11,3 millones, para llegar a 91 millones en 2009.
El aspirante: Trayectoria vertiginosa en siete años
La inmobiliaria Somersen registra un crecimiento acelerado. Creada en 1998, en 2002 facturó 17 millones, 55 millones en 2003 y este año prevé alcanzar 110 millones. El beneficio de explotación de 2003 fue de 10,7 millones, mientras el beneficio antes de impuestos se situó en 4 millones.Suelo en cartera. Somersen posee 1,6 millones de metros cuadrados en propiedad, sobre todo en Costa del Sol y Madrid.