IBM entrega al Gobierno el mayor superordenador de Europa
El Centro Nacional de Supercomputación, con sede en la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC), recibirá una joya informática a lo largo de la próxima semana. Se trata de Mare Nostrum, el mayor supercomputador de Europa y el cuarto del mundo, con una capacidad de proceso de 40 teraflops o 40 billones de operaciones por segundo.
El fabricante ha sido IBM y el dinero, 70 millones en cuatro años, lo ha aportado el Gobierno en una operación no exenta de polémica. En marzo se pudo escuchar a HP y a Sun Microsystems quejarse por lo que entendieron como una concesión sin concurso previo.
Ya el viernes, en el acto de entrega, la explicación seguía siendo la misma de entonces: 'Este es un acuerdo de colaboración por el que IBM iba a crear una gran infraestructura y había 31 países que la solicitaban', dijo el director del Centro Nacional de Supercomputación, Mateo Valero.
Este catedrático de la UPC ha dado explicaciones a los presidentes de los principales competidores de IBM y asegura que han quedado satisfechos: 'No han vuelto a criticar la operación, si quieren traer tecnología punta a España para la investigación les escucharemos'.
IBM firmó el convenio con el Gobierno del Partido Popular y el Ejecutivo socialista ha tomado el relevo con aparente entusiasmo: 'Es una prioridad del Gobierno crear grandes instalaciones científicas. Esta infraestructura será una herramienta fundamental para la investigación y servirá para industrias como la automovilística o la aeronáutica', señaló la ministra de Educación y Ciencia, María Jesús San Segundo.
Mare Nostrum utiliza un sistema operativo Linux, su memoria principal equivale a la de 18.000 PC y pesa 40.000 kilos. La presidenta de IBM, Amparo Moraleda, destaca su escaso consumo de energía, 600 kilovatios, y el reducido espacio que precisa, 160 metros cuadrados. Para la gestión del Centro Nacional de Supercomputación se creará un consorcio entre el Ministerio, la Generalitat y la UPC. Y del dictamen de un grupo de científicos independientes dependerá quién puede utilizar la máquina y para qué.