Neoyorquinos neuróticos
Woody Allen es un maestro a la hora de mezclar la comedia romántica y el drama. En Melinda y Melinda, película que inauguró fuera de concurso el último festival de San Sebastián y que llega hoy a las pantallas, explora algunos de los temas que más le gustan: la lucha personal entre la moralidad, la identidad, la intimidad, los celos y las peculiaridades del amor romántico. Allen regresa a la clase de trabajo que es su santo y seña: una obra coral poblada de hombres y mujeres exitosos, de buen gusto y ocasionalmente neuróticos en Nueva York, cuyas vidas son cada vez más complicadas.
A la hora de elegir el reparto, el cineasta tuvo en cuenta si un actor había hecho comedia o drama. Allen opina que puede coger a un actor cómico para un papel serio y que resulte, pero al contrario no funciona demasiado bien. El elenco está integrado por Chiwetel Ejiofor, Will Ferrell, Jonny Lee Miller, Radha Mitchell, Amanda Peet, Chloë Sevigny y Wallace Shawn.
Conociendo a Julia combina la sofisticada atmósfera del Londres de los años 30 con una serie de observaciones universales sobre los hombres, las mujeres, la vida y el arte. Dirigida por István Szabó (Cita con Venus) y con guión de Ronald Harwood, ganador de un Oscar por El Pianista, a partir de la novela Theatre, escrita por W. Somerset Maugham en 1937, la película presenta a Julia Lambert, una actriz que está en su apogeo, pero que es consciente de que su juventud y fama se van desvaneciendo inevitablemente. Mientras reflexiona sobre su destino, un joven entra en su vida y acabará utilizándola. Pero Julia trama una inteligente venganza. Annette Bening (Julia) está acompañada por Jeremy Irons.
José Luis García Sánchez no se atreve a definir qué tipo de película es María Querida, de lo que está seguro es que contiene mucho amor. El director recupera la figura de María Zambrano en su centenario. La película, que ha participado en la Seminci, está protagonizada por Pilar Bardem y María Botto.
Una de las sorpresas de 2000 fue Falsas apariencias, interpretada por Bruce Willis y Matthew Perry. El éxito llevó a sus responsables a trabajar en una continuación cuando los actores tuvieran un hueco. Más falsas apariencias está dirigida por Howard Deutch. No una secuela, sino todo lo contrario es El exorcista: el comienzo, que se sitúa años antes de los hechos narrados en la película de William Friedkin de 1973.
Coffee and cigarettes está estructurada en torno a pequeñas historias, en las que sus personajes se sientan alrededor de una mesa a tomar café, fumar y discutir.
Los estrenos se completan con Caminos cruzados, la adaptación que el francés Manuel Poirier ha hecho de Carreteras secundarias, la obra de Ignacio Martínez de Pisón que Emilio Martínez Lázaro llevó al cine en 1997; Lost in Mancha, un making of (documental de un rodaje) de una película que no existe del imaginativo Terry Gilliam; Zombie party, con la que Edgar Wright rinde homenaje a George A. Romero (La noche de los muertos vivientes) y la comedia española El chocolate del loro. Y para toda la familia, anticipándose a la Navidad, Blizzard, el reno mágico.