Vodafone se reorganiza y da más protagonismo a su filial española
A partir del 1 de enero próximo, Vodafone España estará más cerca del consejero delegado del gigante mundial del móvil, Arun Sarin, y tendrá más protagonismo en el grupo. Estas son las conclusiones locales de la profunda reorganización a nivel mundial anunciada ayer por Vodafone, que incluye cambios en la cúpula ejecutiva, en la toma de decisiones y en la estructura operativa de la compañía.
La principal repercusión de los cambios es que Sarin aumentará su poder en la compañía, tanto por su participación en el día a día como por las incorporaciones de personas cercanas a él al consejo ejecutivo. El objetivo de la remodelación, sin embargo, es otro y pasa por hacer una estructura más cercana a los clientes y más rápida a la hora de responder a sus necesidades. También facilitará la adopción de estrategias unificadas para todas las filiales, como el desarrollo coordinado de la telefonía de tercera generación.
Buscando estos objetivos, se ha producido un cambio en la estructura de las filiales. España ha dejado de depender de la llamada región sur, se ha independizado de Italia y constituye ahora el país de mayor tamaño dentro de una nueva división para Europa. Su responsable ya no es Pietro Guindani, sino Paul Donovan, un ejecutivo con años de experiencia en Vodafone. La filial española reportará directamente a Donovan que, a su vez, hablará sin intermediarios con Arun Sarin, una vez que se ha eliminado la figura del director de operaciones, que antes se interponía entre ambos.
Cuentas individuales
Otra novedad para España es que, respondiendo al peso que ha adquirido, tendrá un apartado específico en las publicaciones de resultados del grupo. Hasta ahora, su evolución no se desagregaba en las comunicaciones financieras y sólo hacían públicos ciertos números, como los usuarios. A partir de ahora, tendrá un hueco reservado, junto con las grandes filiales: Reino Unido, Italia y Alemania.