Ganan los 'high yield'
Los bonos de alto rendimiento o high yield viven un momento dulce. El rendimiento medio de las emisiones europeas ha caído al nivel más bajo de los últimos siete años, generando dos consecuencias directas. De un lado, la apreciación de estos bonos ha rentabilizado las carteras de los inversores más arriesgados. Del otro, el descenso de los tipos está permitiendo que las empresas refinancien su deuda.
Los bonos de alto rendimiento se están beneficiando de un escenario de recuperación algo atípico. Los tipos de interés de la deuda a largo plazo no han repuntado todavía, lo cual está manteniendo en cotas bajas el tipo de las emisiones más arriesgadas. La falta de atractivo de la deuda pública y de las Bolsas ha generado un fuerte flujo de dinero hacia activos de más riesgo, pero con mayor potencial. La situación podría darse la vuelta en cualquier momento, en cuanto la Bolsa dé muestras de una tendencia alcista sostenible.