El Congreso aprueba una prórroga del recorte de impuestos de Bush
Representantes de las dos cámaras del congreso de EE UU, han acordado prorrogar entre cuatro y seis años más una serie de recortes de impuestos que llegaban a término, promovidos por el presidente, George Bush. El coste total de esta extensión será de 145.000 millones de dólares y no se establece ninguna provisión que obligue a compensar a la hacienda federal por la falta de estos ingresos.
La compensación de estas partidas había sido propuesta por el ala demócrata de las cámaras y los moderados republicanos que pretendían imponer un nuevo gravamen a las familias más ricas o el cierre de paraísos fiscales. La posibilidad de que el debate se dilatara a seis semanas de las elecciones, máxime cuando los recortes de los que se hablaba son los que afectan más a la clase media, hizo que se zanjara la prórroga sin más discusión. Demócratas y republicanos moderados reconocían estar ante la espada y la pared. La espada son las elecciones en las que el presidente y miembros de la cámara se juegan el puesto y la pared es el inmenso déficit presupuestario que este año rondará los 422.000 millones de dólares. Bush se ha comprometido a recortar a la mitad el déficit en cinco años, algo que parece imposible.
Además de estos alivios fiscales, se añadió una rebaja fiscal de 13.000 millones de dólares para empresas que es una renovación de un crédito fiscal para la inversión en investigación y desarrollo.
Para convertir estos recortes en ley ambas cámaras deben volverlos a votar, algo que los grupos aseguran que harán y Bush, ratificarlos con su firma.