El crédito a la actividad productiva se acelera en el primer semestre
La financiación tomada por empresas y familias para la actividad productiva ha experimentado una fuerte aceleración en el primer semestre del año. Así, el crédito total crece un 17%, frente al 14,43% de avance en el primer semestre de 2003. La demanda de las familias sube más del 20%, y más aún la destinada a vivienda. Por sectores, el crédito destinado a la industria desciende.
El crédito total tomado por los sectores no financieros residentes al terminar el mes de junio era de 1,43 billones de euros, contabilizando el que reciben las empresas, las familias y las administraciones públicas. Esta cantidad es un 12,4% superior a la que había un año antes, y acelera su avance respecto a incrementos ligeramente superiores al 10% del primer semestre de 2003.
De este volumen de crédito puede considerarse destinado a actividades productivas la totalidad del concedido a empresas y familias, que asciende a 1,114 billones de euros, un 17% más que un año antes.
Este avance se produce por un desarrollo homogéneo de las dos partidas, ya que la aceleración se produce en ambas. La financiación destinada a las empresas crece un 14,7%, hasta los 627.400 millones de euros. Este avance es ligeramente superior a la experimentada en los dos años anteriores, y con una concentración masiva en actividades del sector servicios. La financiación a los servicios crece a tasas superiores al 21%, desconocidas desde 1996 (en 2002 creció un 10,6% y en 2003 un 17,4%), y para actividad en la construcción lo hizo también en un 21,8%, similar al de los ejercicio 2000 o 2002.
Sin embargo se produjo ya un ajuste en los dos primeros trimestres del año en el crédito recibido para la actividad económica en la industria, pese a la subida de la producción industrial en el mismo periodo; el año pasado al aumento fue limitado, pero positivo: 0,3%. La financiación destinada a actividad agrícola crece a tasas del 8,6%, y llega a 17.100 millones de euros.
Por lo que se refiere al crédito a las familias, avanza un 20,1% (la tasa más alta interanual en los últimos años), y llega ya a 487.500 millones de euros. La aceleración de esta variable en los últimos años ha sido muy pronunciada, ya que en 2001 el crecimiento era del 12,3%; del 15,6% en 2002; y del 18,7% en 2003.
El fuerte aumento de los precios de la vivienda y de la demanda de este tipo de activos han elevado de esta forma la financiación a las familias, que se encuentran en sus niveles de endeudamiento más altos de la historia.
De hecho, para la adquisición de vivienda los hogares tomaron crédito concedido por bancos, cajas y cooperativas de crédito hasta el último día de junio pasado por valor de 286.700 millones de euros. A esta cantidad hay que añadir otros 81.400 millones para rehabilitación de vivienda, adquisición de terrenos y fincas rústicas.
Por lo que se refiere al crédito de la banca a personas físicas para la adquisición de bienes de uso duradero, en el primer semestre llegó a 37.400 millones de euros, con un crecimiento del 6,3%. El comportamiento de esta variable se ha reanimado también en los seis primeros meses del año, ya que en 2002 creció sólo un 4,9%, y en 2003 un 1,3%.
Familias con más deuda que el Estado
Las familias deben más dinero que las Administraciones públicas. Mientras éstas tienen un saldo de financiación ajena de 316.200 millones de euros al terminar el primer semestre de 2004, las familias han tomado crédito por valor de 487.500 millones de euros, como consecuencia fundamentalmente de las compras masivas de activos inmobiliarios, que han experimentado, además, crecientes subidas de sus precios. Los hogares sobrepasaron el endeudamiento de las administraciones públicas por vez primera en 2001, según la serie estadística de financiación a sectores no financieros elaborada por la dirección General de Política Económica.En 2000 las familias cerraron con un saldo de crédito tomado de 287.400 millones de euros, mientras que las administraciones públicas llegaban a 309.300 millones de euros. Pero en 2001 las familias sobrepasaron 322.500 millones de euros, y las Administraciones públicas sólo llegaron a 320.100 millones. Esto es imputable, además del creciente endeudamiento familiar por las viviendas, por la política de control del gasto público llevado a cabo para integrar a España en la Unión Monetaria, y que ha desembocado en equilibrio de cuentas en 2001 por vez primera desde 1978. De hecho, en los últimos cuatro años el crédito a las administraciones públicas ha crecido a tasas inferiores al 2%, y en 2002 y 2004 incluso se ha producido un descenso ligero del saldo del crédito tomado.El saldo de crédito tomado por las empresas era de 627.400 millones de euros al finalizar el primer semestre de 2004.