PP y sindicatos critican el giro de Zapatero
El apoyo explícito que José Luis Rodríguez Zapatero otorgó el martes en el Congreso al Plan Industrial para Izar presentado por la SEPI el pasado día 7 ha provocado una avalancha de críticas de sur a norte de España. Las protestas más duras contra la actitud del presidente del Gobierno llegaron ayer precisamente desde el País Vasco. Fue allí, en un mitin en Bilbao, donde Zapatero anunció el domingo pasado ante los trabajadores de La Naval de Sestao que salvaría los astilleros.
Así, además de los duros enfrentamientos registrados durante toda la mañana de ayer entre los trabajadores de la planta vizcaína y los agentes de la Ertzaintza que dejaron 16 empleados heridos, tanto el PP como el PNV coincidieron en calificar como 'un engaño' las palabras del presidente. El alcalde peneuvista de Sestao, Alberto Lozano, tachó de 'impresentable' la actitud de Zapatero. Lozano dijo desconfiar tanto del PSOE como del PP 'porque entre los dos nos han llevado a esta situación'. El regidor tuvo palabras de comprensión para las protestas de los empleados de La Naval que, dijo, 'temen por el futuro de sus familias porque tienen en mente la reconversión industrial que sufrió esta zona en los 80'.
Miguel Ángel Asporosa, presidente del comité de empresa de la planta vasca, dijo que las protestas eran una 'reacción lógica por la falta de voluntad negociadora desde la SEPI tras el discurso de Zapatero en Bilbao'.
María San Gil, candidata del PP a lehendakari, aseguró en la televisión pública vasca ETB que el jefe del Ejecutivo 'no tiene proyecto para los astilleros' y advirtió de que 'la margen izquierda vizcaína no puede sufrir una segunda reconversión'.
En Galicia, miles de trabajadores de los astilleros de Ferrol y Fene se concentraron frente a la sede del PSOE en esta última localidad y criticaron que el presidente haya acabado apoyando el plan de la SEPI.
Mínimas expectativas
Críticas del PP también desde Sevilla, donde el portavoz parlamentario de esta formación en la cámara regional, Antonio Sanz, insistió en que Zapatero y el presidente andaluz Manuel Chaves 'han engañado una vez más a los trabajadores porque generaron unas mínimas expectativas que ayer por el martes fueron defraudadas'.
Un desengaño que expresaron también los trabajadores de Izar Sevilla, que estuvieron presentes en el pleno celebrado en el ayuntamiento de la ciudad. Ignacio Sánchez, presidente del comité de empresa sevillano, dijo que tras la intervención de Zapatero en el Congreso 'queda en entredicho la promesa de Chaves de que la postura política primaría sobre la de la SEPI'. Chaves hizo esa afirmación tras reunirse con los sindicatos el lunes pasado en Sevilla. Sánchez anunció 'movilizaciones contundentes en los próximos días'.
También los representantes de la industria naval auxiliar de Andalucía se mostraron ayer preocupados por los planes de la SEPI y pidieron que se le apliquen las mismas medidas que se decidan para las factorías de Izar.
Por su parte, Enrique Martínez Robles, presidente de la SEPI, dijo ayer en la Cadena Ser que es 'interesante y posible' la idea de agrupar las instalaciones civiles privatizables en una empresa distinta de Izar. Fuentes del organismo público aseguraron que esta propuesta fue formulada por los sindicatos durante la reunión del miércoles y que esta nueva empresa tendría que nacer con un 51% de capital privado como mínimo.
Dieciséis heridos en las protestas
Las manifestaciones de los trabajadores, en protesta por el fracaso de las negociaciones con el Gobierno, se agravaron ayer en Ferrol y Sestao. Las protestas más violentas se produjeron en la localidad vizcaína, donde los trabajadores cortaron el tráfico de vehículos y quemaron maderas y neumáticos en la calzada. La intervención de la Ertzaintza provocó 16 heridos, uno de ellos grave al impactarle una pelota de goma en el ojo.