Delta suprimirá 7.000 empleos en un esfuerzo por evitar suspender pagos
La estadounidense Delta va reducir un 10% su plantilla en los próximos 18 meses. Unas 7.000 personas dejarán de trabajar para esta aerolínea que trata de evitar la suspensión de pagos con esta y otras medidas como la reorganización del 51% de sus rutas, la rebaja de sueldos y una menor contribución a los seguros médicos de la plantilla. Con ello se quiere rebajar los costes 5.000 millones de dólares.
La aerolínea ya ha avisado en varias ocasiones que la posibilidad de buscar protección judicial ante acreedores es un escenario real e incluso ayer, su consejero delegado, Gerald Grinstein, dijo que 'dada la severidad de las circunstancias, no hay garantías de éxito y no hay tiempo que perder'. Grinstein trató de poner el justo dramatismo en la situación al decir que aún había esperanza para la empresa pero con la alusión a las prisas quiso asegurarse que los sindicatos, especialmente el de pilotos, flexibilizaran su posición ante mayores demandas de recortes de sueldo que los ya acordados.
Delta ha registrado unas pérdidas (con extraordinarios) de 1.650 millones de dólares en el segundo trimestre y desde 2000 hasta 2003 los números rojos ya sumaban 5.600 millones. En los últimos tres años ha eliminado 12.000 empleos. La situación de Delta es similar a la de otras aerolíneas de EE UU que sufren una crisis de la que solo escapan las de bajo coste.