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CincoSentidos

Museos sin seguro de robo

Los museos españoles confían en sus sistemas de seguridad para evitar robos como el de 'El grito', pero admiten que no hay pólizas que cubran las joyas del Estado

Que dos obras de Munch (El grito y Madonna), robadas el pasado domingo del museo del autor en Oslo, carecieran de seguro no parece alarmar a los principales museos españoles. Las colecciones estatales, como es tónica en Europa, no tienen asegurada ninguna de sus obras porque '¿quién aseguraría Las Meninas o el montante de la joyas artísticas de la Pinacoteca?', se preguntan fuentes del Prado en Madrid. El Estado se convierte en único garante ante lo incalculable del valor de cuadros como los que alberga el Reina Sofía o el Prado, que en caso de robo ninguna póliza, por elevada que sea, podría restituir. El Estado responde, es decir, asumiría la pérdida.

Sólo en caso de los préstamos y traslados, las obras se aseguran y se hace 'clavo a clavo', según la aseguradora de arte AxaArt, es decir, desde la sede hasta que vuelve a estar colgado en su sala. Las pólizas suelen oscilar entre el 0,5% y el 1% del valor estimado de la obra. Los principales compradores, según AxaArt, son los museos locales y provinciales, galerías privadas y, sobre todo, particulares, aunque muchos se conforman con seguros del hogar. La casa de coleccionismo Afinsa lleva gastado en 2004 en pólizas de arte un millón de euros. Hay que recordar que las 19 obras que fueron sustraídas del domicilio de Esther Koplowitz en 2001, entre las que se encontraban un Goya y un Juan Gris, no estaban aseguradas.

Pero ¿está España entre los países más expoliados? No, si comparamos las cifras de denuncias realizadas en 2003, unas 80 en la demarcación de la Guardia Civil y unos 50 registradas en la Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional, con las más de 9.000 sustracciones de 2002 en Francia, según Interpol. El tráfico de objetos de arte está sólo detrás de los tráficos de drogas y armas, según la misma fuente.

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¦bull; FORO: §Arte seguro, no asegurado§

Más que pólizas, cultura preventiva. Ricardo Huelin, presidente de la consultoría de seguridad Belt Ibérica, con una rama específica de protección de patrimonio histórico, considera que las pólizas no tienen ventajas cuando lo que debe primar son las estrategias de seguridad.

La seguridad de los principales museos españoles no ha hecho más que aumentar, según los expertos, 'aunque no deja de ser mejorable', asegura Javier Mirallas, presidente de la empresa de seguridad Cess, que se encarga de salvaguardar los tesoros del museo Thyssen Bornemisza.

Circuitos cerrados de vídeo, detectores volumétricos, de metales, sistemas antivibración o de anclaje de un cuadro, con los que se dispara la alarma al menor movimiento del mismo son algunos de los medios técnicos con que cuentan los museos nacionales, además del equipo humano de vigilancia que se prolonga las 24 horas.

¿Qué presupuesto se lleva este despliegue preventivo? Los museos del Prado y Reina Sofía no dieron datos específicos sobre el montante, pero para hacerse una idea vale contrastar que un museo medio como el CAC de Málaga invierte unos 300.000 euros al año en vigilancia y seguridad. En el Reina Sofía, cerca del 70% del personal es de seguridad, según la consultora Belt Ibérica.

Cuando el debate sobre si seguridad y visibilidad de la obra están reñidas se hace más candente, el director del Museo Munch de Oslo ha recibido la propuesta de sustituir los originales de las grandes obras por copias, algo que ha rechazado. El director del CAC de Málaga y gestor cultural Fernando Francés piensa que 'no hay que ser fundamentalista con la seguridad, pero tampoco hay que bajar la guardia. Se debe mantener la tensión dentro de los museos y que el visitante la note', reflexiona. Algo que los expertos en seguridad consideran la pieza clave de sus estrategias: la disuasión.

En España el arte que se roba es poco y de segunda división, según el sargento Pastor, del grupo de Patrimonio Histórico de la Guardia Civil. Los expolios a ermitas e iglesias son los principales objetivos de los delincuentes, junto a las segundas residencias, mientras que los robos a museos son aislados y ocurren, principalmente en salas locales sin apenas seguridad. En 2003, la Guardia Civil registró sólo tres robos en museos.

La Brigada de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional cuenta con un registro con fotografías de unas 5.000 obras robadas en España. El inspector jefe Montero recuerda uno de los últimos grandes robos en museos realizado en España: la sustracción en 1989 del Palacio Real de Retrato de una dama y Mano del retrato del arzobispo Fernando Valdés, de Velázquez, que siguen liderando la lista de obras más buscadas. El expolio arqueológico es el verdadero drama, según Montero y la falta de seguridad en las dependencias eclesiásticas el mayor reto en la lucha del tráfico ilegal de arte.

Robos en cifras

Por paísesItalia encabeza la lista de robos de arte, según la Interpol, con más de 18.000 objetos en 2002. Le sigue, con 9.000, Francia.Más buscadasLa Familia Dupont, de Botero o Naturaleza muerta en la Charllote, de Picasso, están entre las obras más buscadas por la Interpol.Nuevos expoliosLa Unesco estima que 170.000 objetos y un millón de libros han sido saqueados durante la guerra de Irak.

Perfil. Ladrón de medio pelo

De poca monta. Así es el delincuente que roba arte en España, según fuentes policiales y de la Guardia Civil. De nacionalidad española y bajo nivel de organización, las bandas que operan en la sustracción de arte actúan en grupos pequeños y tienen un conocimiento somero de sus botines. Atrás queda el famoso ladrón de antigüedades Eric El Belga, que operó en España hasta principios de los años 80 y esquilmó gran cantidad de piezas del románico y el gótico nacional. El expolio de décadas pasadas parece estar más controlado.

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