Unespa exige el fin de la huelga de grúas para negociar
La subida de tarifas reclamada por los gruistas costaría a las aseguradoras entre 400 y 420 millones de euros y tendría su repercusión en las pólizas de los clientes. Las negociaciones están en punto muerto.
El conflicto de las grúas podría suponer un coste de entre 400 y 420 millones de euros para el sector asegurador si se asumen al completo las reivindicaciones de las empresas de asistencia en carretera. El impacto que el conflicto podría tener en las cuentas de las aseguradoras se repercutirá, en parte, en las primas de los clientes, según Unespa, la patronal del sector.
El incremento de las tarifas se ha convertido en la piedra angular de un conflicto que mantiene desde ayer en paro técnico a la mayoría de las empresas de grúas de ocho comunidades autónomas. 'Las aseguradoras tienen un cierto margen para asumir una subida del coste de las tarifas', señaló ayer Pilar González de Frutos, presidenta de Unespa. Lo que sí quedó claro fue que serán los consumidores los que tengan que asumir en último término un incremento en sus pólizas que variará en función de la capacidad de cada entidad de asumir la subida.
Atender las peticiones de las asociaciones nacionales de empresas de asistencia en carretera, Aneac y Cepas, que piden un incremento del 100% de las tarifas a partir del año que viene y que se revisen las pactadas para 2004 para cubrir 'al menos los costes mínimos', supondría un incremento del 25% en los costes totales. La cuantía soportada el año pasado por las entidades de seguros alcanzó los 1.651 millones de euros, según las cifras de la Dirección General de Seguros (DGS).
Sin embargo, las negociaciones se encuentran a día de hoy en punto muerto. La patronal de seguros señaló ayer que no volverá a la mesa de negociación hasta que se suspenda un paro que considera ilegal y hasta que los empresarios presenten su propuesta por escrito.
González de Frutos reclamó que la patronal ha presentado tres ofertas por escrito desde que comenzó el conflicto que no han obtenido respuesta por parte de los gruistas. La última incluía la realización de un estudio por parte de una entidad independiente sobre los costes del sector. Las compañías estiman, basándose en un estudio de la Universidad de Alicante, que la tarifa actual media se sitúa en torno a los 26 euros por servicio, una cifra que Unespa niega porque señala se refiere tan sólo a servicios urbanos. 'El coste para una asistencia media está entorno a los 55 o 65 euros', dijo ayer la presidenta de Unespa. Sin embargo, la patronal no tiene capacidad para negociar las tarifas ni establecer incrementos de forma generalizada ya que se vulnerarían las normas de libre competencia.
Ninguna de las partes impulsó ayer una salida para las conversaciones. Durante la reunión del martes, se preveía que Pere Navarro, director general de Tráfico, acudiría a la mesa de negociación como mediador. Finalmente, y a falta de una propuesta formal de Unespa, que señala no recibió la petición por parte de las empresas de seguros, Navarro no estuvo presente. 'Unespa no ha rechazado en ningún momento la participación de las instituciones públicas en las negociaciones, pero tampoco consideramos que sea la solución al conflicto', dijo ayer González de Frutos. Por su parte, los empresarios de grúas solicitaron ayer la intermediación del ministerio del Interior para solucionar el conflicto.
Las organizaciones de consumidores recomendaron ayer a los automovilistas que en el caso de verse perjudicados por la huelga de grúas contraten a título particular un servicio privado de asistencia para después reclamar a las aseguradoras el importe del mismo. La Unión de Consumidores de España (UCE) recordó que las empresas de grúas de vehículos, 'no pueden negarse a la atención del servicio, pues se encuentran legalmente obligadas a prestarlo'.
200.000 vehículos en las cunetas cada día
El paro técnico de las empresas de grúas podrían dejar en las carreteras españolas cerca de 200.000 vehículos diarios, según señaló ayer Rafael Merino, el presidente de Aneac (Asociación Nacional de Empresas de Auxilio en Carretera). El Gobierno anunció ayer estar preparando un plan para paliar las consecuencias del paro. A día de hoy el conflicto afecta al País Vasco, Asturias, Madrid, Cataluña, Aragón, La Rioja, Castilla y León y la Comunidad Valenciana, así como a Sevilla, Córdoba y Cádiz.Las empresas de Navarra aprobaron ayer sumarse hoy al paro y otras cinco comunidades -Extremadura, el resto de Andalucía, Cantabria, Murcia y Galicia- estudian unirse. El seguimiento ha sido 'masivo', según las asociaciones y ha sido secundado en la mayoría de las comunidades por el 80% o el 90% de los gruistas.