El Ibex entra en pérdidas en el año por el petróleo y el paro de EE UU
Una tormenta perfecta se formó ayer sobre los mercados de renta variable. El precio del petróleo marcó, por tercera sesión consecutiva, máximo histórico, esta vez en 41,5 euros y sin visos de relajarse. La perspectiva de tipos de interés es alcista ante la reunión de la Fed del próximo martes. Y la economía estadounidense no carbura.
Una tormenta perfecta se formó ayer sobre los mercados de renta variable. El precio del petróleo marcó, por tercera sesión consecutiva, máximo histórico, esta vez en 41,5 euros y sin visos de relajarse. La perspectiva de tipos de interés es alcista ante la reunión de la Fed del próximo martes. Y la economía estadounidense no carbura.
El dato de empleo de Estados Unidos de ayer fue un golpe al mercado donde más le duele, esto es, en las perspectivas de recuperación. En julio se crearon el 13% de los empleos que se esperaba. La reacción del Ibex fue inmediata y pasó de registrar pérdidas inferiores al 1% -provocadas por el nuevo máximo en el precio del brent- a ceder un 1,8% en cuestión de minutos. Al cierre, el índice perdía el 1,98%, una caída que supone entrar en números rojos en 2004. Baja la Bolsa el 0,73% este año, y con el Ibex en 7.681 puntos, está a un paso del mínimo anual, marcado el 17 de mayo.
Después de varias semanas con los analistas hablando de resistencias y soportes técnicos, al final la realidad ha puesto las cosas en su sitio. Con el petróleo por las nubes y Estados Unidos en una recuperación incierta, el cacareado soporte del 7,700 ha saltado por los aires.
El tono bajista del mercado, en todo caso, no es nuevo. Las últimas noticias sólo han terminado por dar la razón a los inversores que no se atrevieron a entrar en la Bolsa al hilo de los resultados del segundo trimestre. El panorama actual pinta poco bien desde los distintos frentes. El petróleo sólo puede moderar con modestia los máximos actuales, por más que la OPEP trate de convencer al mundo de que puede abrir el grifo. La situación de Yukos, Irak y Venezuela, los tres frentes principales, es la de siempre. Mala.
Pero con lo que no contaba el mercado es con una economía estadounidense a la baja. De momento sólo se aprecia desaceleración en el PIB y el empleo, pero un cambio significativo de las expectativas supondría una revisión a la baja de las valoraciones de la Bolsa.
En este contexto se reúne la Fed el martes. El dato de empleo ha hecho replantear las expectativas de subida de un cuartillo. Pero, si finalmente la Reserva Federal cambia el patrón y paraliza las alzas de tipos, el mensaje al mercado sería, probablemente, más preocupante que otra cosa.