La crisis de Yukos dispara el precio del crudo a 41 dólares
En menos de 24 horas, el Gobierno ruso ha dado marcha atrás sobre una decisión que hubiera podido salvar al gigante petrolero Yukos de la quiebra. El ministro de Justicia revocó ayer el desbloqueo de las cuentas embargadas de la compañía, con lo que Yukos no podrá seguir financiando su actividad.
Todos los recursos financieros que lleguen a la petrolera serán embargados y transferidos al presupuesto en concepto de cobro de la deuda de 3.400 millones de dólares (2.822 millones de euros) que Yukos mantiene con el fisco'.
æpermil;sa es la nueva orden que la compañía rusa, el primer exportador de crudo del país, recibió ayer por parte del ministro de Justicia. La decisión, que hizo que las acciones de la empresa se desplomaran un 14%, fue recibida como un jarro de agua fría, pues apenas 24 horas antes, a Yukos se le había dado la orden contraria: desbloquear parte de las cuentas embargadas para que la petrolera pudiera pagar el cambio de crudo y los salarios.
La primera decisión del Ministerio de Justicia hubiera permitido a la empresa efectuar sin problemas los pagos corrientes al fisco, cumplir la orden judicial de cobro de impuestos y multas por el ejercicio de 2000 y seguir financiando la actividad productiva sin tener que declararse en quiebra por falta de liquidez.
Los analistas creen que habrá 500.000 barriles de crudo diarios menos
El director financiero de Yukos, Bruce Misamore, había efectuado incluso optimistas declaraciones ante la prensa, asegurando que la petrolera continuaría con toda normalidad su actividad sin dejar de pagar a Hacienda. Pero ahora la situación sobre Yukos es extremadamente delicada y el Gobierno ruso parece decidido a no dar marcha atrás. En la nota difundida ayer por el Ministerio de Justicia se añade que las declaraciones de Misamore suponen 'un nuevo acto de presión y chantaje a los órganos del Estado con el fin de impedir el cobro de la deuda'.
El Gobierno también ha precisado que las medidas judiciales contra la empresa prosiguen en todo el país. Según los datos de las autoridades rusas, en los últimos días 11 bancos han presentado 89 nuevos apremios de pago contra la petrolera. Además, hay órdenes de inmovilizar propiedades de la empresa en 20 de las 88 repúblicas y regiones del país.
Vía férrea
Yukos advirtió el pasado día 28 que las exportaciones a través del ferrocarril podrían ser suspendidas si el Gobierno no abría las cuentas embargadas, ya que ese tipo de transporte sólo estaba pagado hasta la primera semana de agosto, tal y como afirmó el presidente de la empresa, Steven Theede.
Sin el ferrocarril, precisó la compañía, apenas podría almacenar crudo durante tres días, y después se vería obligada a parar la extracción. El transporte ferroviario es vital para Yukos, ya que la cuarta parte de los suministros se realiza a través de esta vía, en particular a uno de sus principales mercados, China.
Según los analistas, supone otra vuelta de tuerca más del Gobierno de Vladimir Putin, quizá la definitiva, para hacerse con el control del sector petrolífero, a pesar de que éste siempre ha dicho que evitará la quiebra de Yukos.
'La decisión de ayer podría restar 500.000 barriles de crudo diarios a los mercados mundiales', afirmó un experto en petróleo en declaraciones a Bloomberg. 'El precio del crudo, por tanto, podría seguir subiendo en los próximos días, debido a las dificultades para cubrir el suministro'.