La economía española se desaceleró en el segundo trimestre, según el Banco de España
El Producto Interior Bruto (PIB) creció un 2,6% en el segundo trimestre, dos décimas menos que en el trimestre anterior, debido a la mayor aportación negativa de la demanda exterior (cerca del 1,3%) y a la estabilización de la demanda nacional, que creció cerca del 3,5%, según el Banco de España.
En su último informe de coyuntura, la entidad bancaria destaca que la economía española se encuentra, a medida que avanza el año, en un entorno internacional favorable, únicamente ensombrecido por el aumento del precio del petróleo. Así, ha señalado que sigue beneficiándose de unas condiciones monetarias holgadas que estimulan el gasto de los agentes privados. A este respecto, considera que "el tono de la política fiscal podría resultar moderadamente expansivo en 2004".
Sin embargo, añade el Banco de España, parecen vislumbrarse los primeros síntomas de algunos cambios que, de confirmarse, modificarán la composición del crecimiento de la economía española en los próximos trimestres, a medida que los impulsos monetarios tiendan a remitir, la construcción atenúe su expansión y el crecimiento de la inversión se consolide.
Sigue aumentando el endeudamiento de las familias
El gasto de las familias, en consumo y en vivienda, volvió a aumentar de forma apreciable en el segundo trimestre, pero con una tendencia hacia la moderación. Así, el crecimiento de la renta disponible de las familias, aunque puede que supere al del año pasado, se ha visto recortado por el repunte de los precios de consumo y, en menor medida, por la ligera desaceleración del empleo.
Además, el organismo emisor no espera que la tasa de ahorro vaya a recuperarse en el promedio del año, por lo que la capacidad de financiación de las familias puede acabar situándose en unos niveles muy reducidos. De hecho, el nivel de endeudamiento ha seguido aumentando, aunque la situación patrimonial de los hogares sigue siendo sólida.
En todo caso, el crecimiento del endeudamiento y el elevado porcentaje del ahorro que debe dedicarse al servicio de la deuda podrían condicionar en el medio plazo la expansión del consumo y la inversión del sector de los hogares, sobre todo si se produjeran aumentos significativos del coste de financiación o correcciones sustantivas en el valor de sus activos. En este sentido, los datos recientes sobre la evolución del precio de la vivienda indican el mantenimiento de tasas de crecimiento elevadas, aunque se ha producido una ligera desaceleración.
Preocupación por las economías latinoamericanas
El Banco de España ha advertido en su informe de que las economías latinoamericanas están expuestas a "nuevos episodios de turbulencia" porque las reformas emprendidas en la década de los noventa son "insuficientes" y no existe una verdadera disciplina fiscal. Lo cual, según la entidad bancaria, provoca una "elevada vulnerabilidad económica y financiera" de los países de la zona.