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Mercado gris

Los fondos compran títulos de Google en la banda alta de precios

En pleno verano, Google, el buscador de internet con más seguidores en el mundo, ha decidido salir a Bolsa. El calor y las vacaciones no han influido en el interés de la compañía por parte del inversor. En el mercado gris, donde los fondos cruzan sus apuestas de una forma extraoficial, las acciones se están comprando a 123 dólares y vendiendo a 127. La banda orientativa de la oferta oscila entre 108 y 135 dólares, lo que supone que se está valorando inicialmente entre un 14% y 17% por encima de la banda más baja. De cualquier forma, las apuestas han ido relajándose en el transcurso de los días. Al principio, las compras llegaron a alcanzar los 133 dólares, sólo un 1,48% menos que la referencia más alta.

'Con una valoración de 30.000 millones de dólares, Google tiene un PER veces que el precio de la acción contiene el beneficio de 142 veces, lo que lleva implícito un crecimiento del beneficio y de ventas del 100%. Está muy por encima del sector y de sus competidores', comenta Felipe Mesía, analista de SelfTrade.

Yahoo, que es la compañía más similar a Google, cotiza actualmente con un PER de 93,37 veces y tiene una capitalización en el mercado de 1.186 millones de dólares.

Mesía critica el roadshow (gira para presentar la compañía entre inversores) que ha hecho Google. 'Las presentaciones de los gestores de la empresa vinieron acompañadas de buen humor, pero no de los datos suficientes que un inversor exige para abrir su cartera. La OPV de Google se empieza a empañar, sobre todo, debido a la sobrevaloración que presenta', comenta.

Google va a hacer una OPV exclusivamente para los inversores de Estados Unidos. Pero no todos los que quieran participar en la oferta podrán hacerlo. Los fundadores de la empresa, Segey Brin y Larry Page, se reservan el derecho de poder elegir los futuros accionistas de su empresa y rechazar a aquellos que por algún motivo no les satisfaga.

Google utilizará para su salida a Bolsa una fórmula revolucionaria: la subasta holandesa, que en definitiva se trata de una subasta electrónica. El inversor deberá formular peticiones de compra, con una solicitud mínima de cinco acciones, a través de internet, teléfono, fax o en persona y darles una valoración. Google analizará las apuestas de los interesados para fijar finalmente el precio. Cotizará en el Nasdaq y el día del estreno puede ser esta misma semana.

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