JP Morgan aconseja 'explotar la incertidumbre' para comprar Telefónica
Los analistas de JP Morgan aconsejan al inversor adelantarse a la oleada de calificaciones positivas que esperan sobre Telefónica y señalan que la compra de los activos latinoamericanos de Bell South hace más atractiva la acción.
El precio objetivo que JP Morgan calcula para Telefónica es de 15,7 euros por acción, lo que está un 31% por encima de la cotización de cierre de ayer, 11,95 euros. Los analistas explican que la compra de los activos de Bell South en América Latina creará valor para la empresa, tanto por la posibilidad de aprovechar el mayor tamaño para controlar los costes, como por el hecho de que la empresa ha adquirido activos infravalorados en un 21%, a juicio de JP Morgan.
'Aconsejamos a los inversores explotar la actual incertidumbre del mercado sobre esta compra para sobreponderar Telefónica, antes de los resultados y de las mejoras de valoración que esperamos', afirma el informe del banco de inversión estadounidense. La incertidumbre sobre los aspectos regulatorios de la operación ha cortado el recorrido de la acción. Los analistas consideran, además, que es mejor jugar la carta de esta compra a través de Telefónica que de Móviles, pues a pesar de que la filial mejorará más sus cuentas, hay en la matriz un potencial superior.
Desde principios de marzo, cuando la operación fue anunciada por la empresa, Telefónica ha retrocedido un 9,54%, mientras que el Ibex 35 ha perdido un 4,26%, esto es, menos de la mitad. La acción perdió en la sesión de ayer la cota de los 12 euros tras retroceder un 0,83%. Telefónica presenta los resultados del primer semestre del año el próximo día 28.
Desde que anunció la operación con Bell South, Telefónica ha bajado el 9,54%
Un sector pendiente de las fusiones que vienen
Los últimos informes de bancos de inversión internacionales, como HSBC o Goldman Sachs, sobre el sector de telecomunicaciones, destacan desde la primera página el principal atractivo de la industria: las fusiones. Las empresas de telecomunicaciones han purgado durante 2001, 2002 y 2003 los excesos cometidos en la época de la burbuja, de la que salieron endeudadas y con inversiones poco rentables.El saneamiento ha convertido a estas compañías -que en Europa explotan cuasi monopolios- en máquinas de recaudación y, reducida la deuda, han de optar entre mejorar la retribución al accionista o emprender operaciones de compra. Telefónica, no obstante, no aparece entre las favoritas a protagonizar procesos de concentración por su tendencia a comprar activos en América, zona natural de expansión.