Las autoridades de Melilla abrirán un expediente contra Endesa por el apagón
Después de casi cinco horas de apagón total, la ciudad de Melilla ha recuperado el suministro eléctrico tras una avería en los motores de Endesa que ha paralizado por completo la actividad de la ciudad autónoma. El consejero de Medio Ambiente de la ciudad autónoma, Ramón Gavilán, ha anunciado que la compañía deberá hacer frente a un expediente sancionador después de que se identifiquen las causas del corte e informado de que los clientes perjudicados podrán efectuar sus reclamaciones ante Endesa.
Aunque la eléctrica estudia todavía las causas que provocaron la avería, Gavilán cree que ésta podía situarse en una de las cinco cabinas auxiliares de la central. La ciudad estuvo sin suministro desde las 08.03 horas, cuando se produjo el disparo simultáneo de los grupos de la central de Melilla de Endesa que estaban en servicio en ese momento, por actuación de las protecciones automáticas de su sistema de control.
Al producirse el disparo, según ha explicado Endesa, se procedió "de inmediato" a arrancar grupos para suministrar energía a los servicios auxiliares que permitieran arrancar el resto de los grupos generadores. Sin embargo, "como consecuencia de la parada súbita de los
grupos", se habían ocasionado "malfunciones" en diversos componentes de los sistemas de control que provocaron un "retraso" en el proceso de arranque.
A las 9.00 horas, Endesa había conseguido suministrar energía a los servicios auxiliares, lo que permitió el arranque de la turbina de gas de la central y del grupo diesel número 10, y a continuación se conectó la primera línea de suministro, con lo que a esa hora estaba repuesta el 45% de la demanda normal.
La compañía eléctrica continuó el proceso de arranque de grupos y cierres de líneas en coordinación con la empresa distribuidora, lo que permitió reponer totalmente el servicio a las 11.27 horas. La compañUa ha anunciado que está "evaluando y analizando" las causas que pudieron producir el corte de suministro eléctrico, que ocasionó numerosas molestias entre los vecinos y desperfectos en
comercios y hospitales.
Durante más de tres horas no funcionaron los semáforos, ni los ascensores ni el aire acondicionado, excepto en los pocos sitios que utilizan generadores con motores de explosión. Según fuentes de la Delegación del Gobierno, el
Hospital Comarcal tuvo que suspender sus intervenciones quirúrgicas, aunque sus propios grupos electrógenos evitaron que se produjeran graves incidentes en el funcionamiento del centro.
"Lo hemos pasado mal hasta que llegó la luz", denunció un
portavoz de la Cruz Roja, pues "no funcionaba nada, ni ordenadores ni electrodomésticos, etcétera", una situación que precisó que fue "especialmente desagradable en el Centro de Drogodependencias". El mercado de la ciudad también se ha visto perjudicado, sobre todo los productos congelados y frescos, que necesitan del frío, y en especial el pescado en la lonja, ya que en ese periodo no
funcionó la fabricación de hielo.