Las empresas del continuo inflaron 382 millones sus resultados
Aunque la lucha contra las salvedades se extiende a todos los tipos de cuestionamientos que hace un auditor, hay unas que se temen más que las demás. Son las salvedades cuantificadas con impacto en los resultados y el año pasado siete empresas del continuo las lucieron.
Gamesa, Service Point, Nueva Montaña Quijano, Catalana Occidente, Avánzit, Tafisa y Amper no publicaron en 2003 los resultados que les correspondía, según sus auditores. Y todas ellas tienen algo en común, que es un signo negativo delante de la rectificación. En ninguno de los casos los ajustes de los auditores han provocado un aumento de los beneficios de estas compañías; todas inflaron los resultados.
La suma asciende a 381,5 millones que deberían descontarse, según los auditores, de la cifra de beneficios consolidados del mercado continuo, que se reducirían un 1,61%.
La mayor parte de la desviación procede de una única empresa: Avánzit. La sociedad recién salida de la suspensión de pagos se apuntó 243,6 millones de beneficios extras por la contabilización inadecuada de créditos fiscales, explica Deloitte & Touche en su auditoría. Esta corrección convierte el beneficio récord que Avánzit anunció en 2003 en pérdidas de 162 millones.
Este no es el único caso en que lo peor sucede y las rectificaciones del auditor convierten en números rojos lo que las empresas consideraban beneficios. También Amper está en esta situación, porque sumó 13,15 millones de más al utilizar las reservas -y no los resultados- para sanear su balance.
Service Point es el último de esta lista. Tiene tres salvedades cuantificadas por amortizar fondo de comercio contra reservas, utilizar el balance para regularizar resultados extraordinarios procedentes de reestructuraciones y por activar en exceso créditos fiscales. Después de tres años de pérdidas, Service Point anunció en 2003 la vuelta a beneficios, con 0,22 millones, pero no para el auditor, que resta 21,6 millones a esta cifra.
El resto de las empresas mantiene el signo de los resultados, ya sea porque estuvieran ya en pérdidas o porque tengan beneficios suficientes para asumirlo. Aún así, el efecto es demoledor en casos como el de Nueva Montaña Quijano, que multiplicaría por 15 sus pérdidas al haber activado créditos fiscales cuando el auditor considera muy dudoso que en el futuro genere beneficios suficientes para recuperarlos. También en Tafisa el efecto es contundente, ya que elevaría sus números rojos el 55% por la misma causa que Nueva Montaña Quijano.
Y entre los que tienen beneficios, los de Catalana Occidente se reducirían a la mitad por un cambio en los principios contables con el que los auditores están, con todo, de acuerdo. Gamesa, por último, es la menos afectada por la salvedad, que reduciría mínimamente sus beneficios de 202 millones.