Los resultados de las tecnológicas decepcionan y hacen caer al Nasdaq un 3% en la semana
El Nasdaq, con un descenso semanal del 3%, es el protagonista de las tribulaciones de Wall Street. La preocupación del mercado es que, tras una racha excepcional de resultados, éstos empiecen ahora a ceder. Los inversores comienzan a preguntarse si no están pagando demasiado por unas empresas que ya no van a dar tantas buenas noticias. La rentabilidad por dividendo del S&P 500 es del 1,6%, frente al 3,4% del Euro Stoxx, lo que viene a decir que el índice estadounidense es el doble de caro que el europeo. La jornada de ayer fue de rebote técnico, tras los últimos descensos. Pero las ganancias no impidieron que el balance semanal sea de pérdidas del 0,68% en el Dow Jones y del 1,12% en el S&P 500.
Uno de los valores más castigados en la semana ha sido Yahoo. La propietaria de algunos de los portales más populares de Internet obtuvo un beneficio bruto en el segundo trimestre de 535 millones de dólares, frente a los 275 millones que registró en el mismo periodo de 2003. Los resultados, sin embargo, no convencen a los inversores. Las acciones perdieron el jueves un 7,73% y la sangría continuó ayer, sumando el sexto día consecutivo de pérdidas. El valor estará bajo presión creciente en los próximos meses, según se vaya materializando la OPV de Google.
La semana que viene será clave para el sector. Intel presentará resultados. Lehman Brothers advirtió hace unos días que el primer fabricante mundial de semiconductores dará una sorpresa desagradable en materia de beneficios. Los inversores confían en que no se cumplan sus peores presagios.
Goldman Sachs ya espera que el crecimiento pase del 3,8% en el segundo trimestre al 2,5% en el primero del año que viene. El banco anticipa además un descenso medio del 2,5% en los beneficios empresariales de 2005.
Las exigencias de los inversores castigan la cotización
El mayor productor de aluminio del mundo, Alcoa, ha fallado a los inversores y éstos le han castigado con descensos en Bolsa. Sus beneficios crecieron en el segundo trimestre un 87% respecto al mismo periodo de 2003, pero los resultados estuvieron por debajo de lo que esperaba y, en consecuencia, la cotización ha empezado a bajar y ahora está más cerca de los 32 que de los 33 dólares. Y todo, a pesar de que la compañía trazó un panorama positivo para los próximos meses.