La actividad en los servicios se desaceleró en junio en la Unión Europea por la presión del precio del crudo
El sector servicios de la Unión Europea, dominante en la actividad económica europea, creció a un ritmo más lento en junio debido a la disminución de la demanda en Alemania y al alza de los precios del petróleo, factores que afectaron al margen de beneficios de las empresas, según un estudio realizado entre 2.000 empresas publicado el lunes.
El índice Reuters de Actividad Empresarial en la Eurozona se situó en junio en 55,3 puntos, cuando en mayo fue de 55,8 y por debajo de las expectativas de 55,6.
Sin embargo, junio se convirtió en el duodécimo mes de expansión del sector, que contabiliza dos tercios de la economía de la zona euro, con el índice todavía por encima del 50,0 que separa el crecimiento de la desaceleración. El ritmo de crecimiento se situó ligeramente por encima de la media en una serie de 6 años.
'El estudio subraya que estamos en el comienzo de una recuperación en la zona euro', afirmó Elwin de Groot desde Fortis Bank en Amsterdam. 'Pero existe cierta debilidad en Alemania, lo que es preocupante. El índice de empleo en la zona euro casi no cambió en junio, pero fue afectado por las débiles cifras de empleo alemanas'.
El aumento del precio del petróleo y el escaso aumento de la inflación provocó por tercer mes consecutivo que los costes de producción alcanzaran la cota más alta desde abril de 2002. Al mismo tiempo, los precios que cobran las empresas por sus servicios llevan descendiendo desde febrero, lo que provoca la disminución de los beneficios.
'La presión ejercida por los precios continúa aumentando, y esto nos preocupa', afirmó Luke Thompson de la consultora NTC, que realiza estudios para Reuters.
'El estudio realizado sobre el sector manufacturero en la zona euro arroja algo de luz, ya que parece que los precios del petróleo han tocado techo, ayudando a elevar los precios de los factores de producción', agregó. El índice manufacturero de junio publicado el jueves pasado fue de 54,4 puntos después del 54,7 alcanzado en mayo. El lento crecimiento se asocia a que la demanda en exportación no ha sido lo suficientemente fuerte para compensar la debilidad del volumen de gasto de los consumidores domésticos.