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Motor

El presidente de GM Europa insinúa que el ajuste continuará

El presidente de General Motors en Europa, Fritz Henderson, ha esperado muy poco para lanzar una severa advertencia: la compañía baraja la posibilidad de realizar nuevos recortes de costes en Europa.

Henderson, no obstante, matizó que la idea aún no está del todo madura. 'Actualmente no hay detalles de nuevos planes de reestructuración', aseguró el directivo en una entrevista publicada en la edición de ayer del rotativo económico alemán Handelsblatt, 'pero está claro que algo tenemos que hacer'.

Henderson asumió la presidencia de la filial europea el pasado 1 de junio. Su tarea principal será hacer que los beneficios vuelvan a la división, después de cuatro años en los que las pérdidas han sumado 3.000 millones de dólares.

En un principio, el gigante de la automoción preveía que el fabricante retornase a beneficios este año. Sin embargo, el pasado 14 de junio se vio obligado a reconocer que el bajo crecimiento de las ventas les llevará a guarismos negativos este año. Ayer, Henderson declaró que no sabe cuándo llegarán los beneficios. 'Aún no hay un calendario', aseguró. 'Por el momento, intentamos descubrir cómo salir del agujero'.

Una de las primeras medidas para retornar a la rentabilidad se dio a conocer el pasado viernes. La empresa realizará una reestructuración organizativa, por la que las marcas Opel, Vauxhall y Saab perderán independencia y autonomía en aras de una mayor 'flexibilidad' y más celeridad en la toma de decisiones. En la práctica, supondrá más integración y sinergias en la fabricación, que Henderson calificó como 'lograr una misma arquitectura de coches'.

Opel lleva años aplicando un programa de ajuste de costes, llamado Olympia, con el que pretende ahorrar 2.000 millones de euros en costes en sus centros europeos.

El pasado viernes, la matriz en Detroit ratificó a Henderson en su puesto. Su número dos será Carl Peter Forster, actual presidente de Opel. Forster ha sido designado consejero delegado de GME y presidente del consejo de vigilancia de la compañía. Al frente de la marca alemana se ha colocado a Hans Demant, quien unirá a su nueva responsabilidad su actual cargo de vicepresidente de Ingeniería para GME.

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