La banca española será la tercera con más número de votos en la nueva Visa Europa
La nueva Visa Europa echará a andar el próximo 1 de julio como compañía independiente de Visa International. La banca española será la tercera más potente, con el 11% de los votos en la entidad creada, sólo después de Reino Unido y Francia.
Para las entidades españolas, la ventaja de la mayor autonomía de Visa será contar con soluciones tecnológicas y productos más adaptados a su mercado y con una respuesta más ágil a sus demandas, explicó ayer Steve Perry, vicepresidente de Visa Europa, en entrevista con este diario. Eduardo Merigó, ex presidente de Visa España y que ya estaba en el consejo de Visa International, será el representante de la banca española.
Con el cambio de estructura 'ganamos influencia en el mercado' y también como grupo de presión ante instituciones como la Comisión Europea. Uno de los retos es buscar un mercado único de pagos, un proceso que está en marcha pero para el que es difícil poner plazo, según Perry.
El nuevo reparto de poder dentro de Visa International, 'nos da ventaja para competir' con el principal rival, Mastercard, que 'está haciendo el movimiento contrario y yendo hacia una mayor centralización', afirmó Perry. La principal arma que exhibe Visa frente a su competidor en España -ante su amenaza de alcanzarle en cuota en 2006- es que sigue dominando el pago con tarjeta en los comercios.
En cuanto al retraso de la banca española en la incorporación masiva del chip en las tarjetas en 2005, Perry afirmó que Visa 'respetamos la decisión'. Y asegura que no está claro que esto suponga un riesgo de alza en el fraude cuando la responsabilidad pase a los emisores de tarjetas que no lleven chip. España presume de tener una de las tasas más bajas de la UE, que ronda el 0,3%.
En relación al espinoso tema de las comisiones que los medios de pago cobran al comercio por las compras con tarjeta, Perry sentenció que las tasas están en un nivel 'adecuado'. Y añadió que los establecimientos no deberían verlo como un 'alza de costes' sino como el precio por 'dar valor añadido' a los clientes.
Visa Europa cerró el primer trimestre con 234,6 millones de tarjetas (de las que 133,4 millones son de débito y 96,3 millones, de crédito) y con un volumen de pagos de 848.300 millones de euros.