El té, la medicina más natural
El té es, después del agua, la bebida que más se consume en el mundo. Cuenta la leyenda que empezó a beberse hace 4.500 años, después de que el emperador chino Shen Nung lo ingiriera por casualidad. Estaba descansando debajo de un árbol de té silvestre cuando en su taza de agua caliente cayó una hoja. Y la infusión le gustó. La bebida se popularizó primero en China, pero no llegó a Europa hasta el siglo XVII, de la mano de los comerciantes europeos.
En sus orígenes, el té era concebido como una bebida medicinal o tónico y varios estudios realizados en los últimos años demuestran que esta concepción es cierta. Una investigación realizada en la Escuela de Medicina de Harvard (EE UU) concluye que el té verde tiene un componente, un polifenol llamado galato de epigalocatequina, que posee efectos preventivos frente a la aparición de cánceres del aparato digestivo.
Otros estudios anteriores han revelado que el té, especialmente el chino verde, es eficaz también para reducir el colesterol, para prevenir enfermedades cardiovasculares, para proteger la piel de los rayos ultravioletas y puede ser una ayuda eficaz a la hora de perder peso. Se recomienda beberlo por la tarde porque ayuda a hacer la digestión.
La diferencia entre el té verde, el negro, el rojo y el blanco está en la forma en que se recolecta y en el tipo de fermentación y secado de las hojas. El verde no se deja fermentar. Así, los polifenoles, las sustancias responsables de los muchos beneficios del té que se encuentra en las hojas recolectadas, no son destruidas durante el proceso de fermentación.
De esta explicación podría deducirse que únicamente el té verde es el sano. Pero no, tanto el negro como el rojo tienen también propiedades preventivas. El té negro, el más consumido en occidente y por las mañanas, es eficaz para combatir el dolor de cabeza, previene la osteoporosis y ayuda a aumentar la concentración mental por la alta dosis de teína que contiene.
El té rojo tiene propiedades relajantes y ayuda a conciliar el sueño, por lo que está especialmente indicado para beber por la noche, antes de dormir.
A pesar de que nadie discute las propiedades beneficiosas del té, no se ha establecido la cantidad adecuada que se debe ingerir cada día. Hay estudios que hablan de una taza, mientras otros recomiendan beber hasta cuatro. A la hora de decidir la dosis se debe tener en cuenta que una taza de té contiene cafeína, entre la mitad y la tercera parte que una de café.
De gama alta
l El furor por una dieta sana y un estilo de vida saludable ha incrementado los aficionados al té. Y no a cualquier té. Como en todos los tipos de comidas y bebidas, también los hay delicatessen. La cadena de tiendas Semon, dedicada a la venta de productos gastronómicos de gama alta, importa en exclusiva el té francés Mariage Frères. Esta empresa elabora desde 1854 té que recoge en varios países asiáticos. El té verde que importa Semon está aromatizado con esencia de jazmín. Dispone también de dos variedades de verde, dos rojos y una gama de negros que han sido aromatizados con esencias de flores, frutos de China y Tíbet o con chocolates y malta. En total, 35 tipos diferentes, con precios de entre 3 y 35 euros la lata de 100 g. Semon tiene tiendas en Barcelona, Madrid y Marbella.