China, apuesta segura en tiempos de incertidumbre
El éxito de China es una historia duradera. Así lo considera Thomas Gerhardt, responsable de mercados emergentes de la gestora DWS, del grupo Deutsche Bank, que, con 115.000 millones de euros en activos, es la gestora de fondos más grande de Europa. El flujo de inversión directa extranjera, 60.000 millones de dólares, es una prueba de la confianza del mercado internacional en China. La cifra supera el volumen de capitales que recibe el resto del continente.
Gerhard resta minimiza las consecuencias del posible enfriamiento de la economía china. 'Con unas perspectivas de crecimiento de entre el 7% y el 8% durante los próximos 10 años, eso no tiene la menor importancia', afirma el gestor. Los activos chinos representan entre el 16% y el 17% de la cartera de emergentes de DWS, entre sus valores preferidos destacan Petrochina, China Petroleum & Chemical y China Mobile. El auge de China es un motor para el resto de la región. Así, el 26% de la demanda mundial de acero procede del gigante asiático y ahí están bien posicionadas las empresas surcoreanas y niponas.
La otra gran economía ascendente de la zona es India. Allí, los principales problemas son la falta de un tejido sólido de infraestructuras y la falta de dinamismo del mercado de demanda doméstica, el gran hecho diferencial de la economía china. Las perspectivas de crecimiento de India son del 7% al 9% en los próximos años y el sector realmente fuerte y competitivo a nivel mundial es del tecnología de software. India representa el 12% de la cartera de emergentes de DWS.
El tercer pilar de la cartera de la gestora es Rusia, con un peso del 10%, gracias a la pujanza de las empresas de petróleo y gas, que representan el 65% de la capitalización del mercado ruso.