La agonía de los Nuba, las últimas 'personas puras'
Los Nuba, un pueblo africano que se estableció al sur de Sudán para huir de los traficantes de esclavos y cuya supervivencia está hoy gravemente amenazada, salen del olvido en una exposición fotográfica que el reportero asturiano Antonio Cores inaugurará el próximo 3 de junio en Madrid.
'Cuando visité las montañas Nuba me encontré a las personas más felices y saludables del planeta. Los llamé las personas puras', cuenta el autor. Sudán vive desde hace décadas una guerra civil no declarada entre el norte árabe y el sur de mayoría negra.
La galería Imaian (calle Villanueva, 10), especializada en arte africano, acogerá unas 40 de las más de 3.000 fotografías realizadas por Cores desde 1978, uno de los fondos más importantes del mundo sobre esta tribu, cuya población ha menguado desde los dos millones de personas a un número que se calcula entre 200.000 y 250.000.
El autor, que prepara además un documental sobre esta etnia, denuncia que el pueblo Nuba está 'condenado desde mediados de los ochenta a un implacable exterminio por el Gobierno del Norte', en un 'genocidio ignorado por los países desarrollados'.
Las montañas Nuba son fortalezas de granito naturales en la sabana de Kordofan donde se refugió este pueblo en difíciles condiciones naturales. Su civilización, según el relato de Antonio Cores, se desmarcó del dominio masculino y se apoyó en 'las mujeres sabias, que cuidan de la paz, sanan a los enfermos y llaman a la lluvia'.
Para Cores, las montañas Nuba 'no sólo conservaron el África primordial, sino también la sensibilidad humana original y democrática'. La zona estuvo aislada hasta que en 1983 se impuso en el país la Sharia o ley islámica. Los Nuba se rebelaron para salvar su cultura y son víctimas desde entonces de una sanguinaria represión, según el relato de este reportero.