España frena la entrada de Gibraltar en la asociación de reguladores de mercado
Unanimidad en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y el Ministerio de Asuntos Exteriores: hay que frenar la aspiración de Gibraltar a incorporarse como miembro ordinario de la Organización Internacional de Comisiones de Valores (Iosco), pues ello significaría tanto como otorgar el pasaporte comunitario a las empresas de servicios de inversión que operan en el Peñón y legitimarlas para operar en todo el territorio de la Unión Europea.
La Financial Services Comission (FSC) de Gibraltar, el equivalente a la CNMV española, intentará incorporarse a Iosco en la reunión que el comité ejecutivo de este organismo tiene previsto celebrar a partir del martes de esta semana en Ammán (Jordania). Ya lo intentó sin éxito en las reuniones de Atenas, Seúl y Madrid de los dos últimos años.
Fuentes gubernamentales aportan dos razones, una política y otra técnica, para rechazar las aspiraciones gibraltareñas. La primera descansa en el artículo 299.4 del Tratado constitutivo de la Comunidad Europea, donde se establece que Gibraltar es un territorio cuyas relaciones exteriores corresponden al Reino Unido. Otra referencia inmediata de ello se encuentra en el acuerdo hispano-británico de autoridades de 19 de abril de 2000. La motivación técnica para frenar la incorporación gibraltareña al Iosco es que el propio Reino Unido tiene pendiente una inspección sobre la FSC antes del verano.
Las empresas de inversión del Peñón aspiran al pasaporte comunitario para operar en toda la UE
La CNMV española estará representada en la reunión por su presidente, Blas Calzada y por su responsable de Internacional, Juan Carlos Recoder. Pese a que la sede de la secretaría general de Iosco está en Madrid, España es sólo miembro ordinario de la organización y no forma parte de su comité ejecutivo. Calzada ha presentado su candidatura para incorporarse a este órgano y la votación se hará el miércoles. En el se sientan 16 países, y ahora se cubrirán nueve vacantes.
De la reunión de la capital jordana saldrán también recomendaciones para mejorar la supervisión de las compañías auditoras a la vista de escándalos financieros como los de Enron y Parmalat.
Uno de los cinco grupos de trabajo se centrará en este asunto, así como en la detección de los fallos percibidos en los gobiernos corporativos de las empresas, problema en el que ya la OCDE ha elaborado algunas recomendaciones de prevención.
Otro de los grupos profundizará en el estudio de las emisiones de bonos privados, en donde se ha detectado una participación creciente de pequeños inversores.
Falta de cooperación con otros organismos supervisores
Los motivos que han frenado hasta ahora la incorporación de la Financial Services Comission (FSC) de Gibraltar a la organización que agrupa a más de 170 organismos supervisores de los mercados han tenido mucho que ver con la falta de cooperación de la propia FSC a la hora de intercambiar información, además de las numerosas dudas existentes acerca de la propia jurisdicción gibraltareña.Con habilidad y cierta diplomacia, las autoridades gibraltareñas sí han logrado su admisión en otros organismos internacionales como la Asociación Europea de la policía de puertos y aeropuertos, la Asociación Mundial de pequeñas y medianas empresas o la Bird Life International. No son organizaciones estatales.