El Pentágono desaconseja comprar los aviones cisterna de Boeing
Un revés más para Boeing. Un reciente estudio hecho por un comité del Pentágono concluye que las Fuerzas Aéreas no necesitan sustituir sus actuales aviones cisterna de forma inmediata. Este veredicto va contra los intereses de Boeing que ha intentado durante meses cerrar un contrato de lease valorado en unos 20.000 millones de dólares para proporcionar 100 nuevos aparatos a las FF AA.
Este informe, elaborado por el comité de Ciencia y Defensa del Pentágono, es el más importante de los que evaluará el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, para determinar seguir adelante o no con el programa de reemplazo de aviones. En el estudio, dado a conocer ayer por The New York Times, se especifica que no hay razones ni materiales ni financieras para seguir adelante con este pedido.
El contrato, que está en suspenso actualmente, ha estado rodeado por una serie de problemas éticos y de presunto trato privilegiado que a finales de 2003 terminaron provocando la dimisión del presidente, Phil Condit. Las circunstancias que ha rondado a este caso de presunto tráfico de influencias entre el Pentágono y Boeing se siguen investigando mientras las posibilidades de que el contrato siga adelante se reducen.