Abril, un mes de transición para los planes bursátiles
El mes de abril se ha despedido con ganancias acumuladas en los planes de pensiones, pero algo más moderadas al cierre del mes de lo que habían llegado a estar hace apenas dos semanas. Las correcciones de estos últimos quince días del mes han restado a los planes de pensiones de renta variable más de un 3% de la rentabilidad acumulada en el año, por lo que han despedido el mes con una ganancia acumulada del 4% en el primer cuatrimestre, equivalente a un 18% en los doce últimos meses.
Los planes de renta variable se mantienen, no obstante, como los más rentables del momento, por delante de los mixtos y por supuesto de los planes de renta fija. Pero el conjunto del mes recién terminado ha aportado muy poco a los rendimientos de la mayor parte de los planes, por lo que puede considerarse un mes de transición a la espera del posible cambio de rumbo en la política monetaria hacia tipos de interés más altos. Un cambio que los mercados de renta variable temen y que están reflejando de forma bastante negativa y que los planes de renta fija encajarán con desigual suerte, mal los que actúan en mercados largos y mejor los que operan en los mercados de renta fija a corto plazo. Es decir, los más conservadores. La renta variable es, en todo caso, la principal damnificada del momento como reflejan los resultados de estos fondos al cierre de abril.
Los planes de renta fija acumulan en los doce últimos meses modestos rendimientos que oscilan entre el 1% y el 2%, aunque en los cuatro primeros meses del año la mayoría presenta rentabilidades inferiores al 1%. La evolución alcista de los tipos a largo plazo puede perjudicar a la mayor parte de los fondos de renta fija a largo plazo, a excepción de algunos planes muy especializados en segmentos concretos del mercado, como los planes de bonos en high yield o en algunos mercados emergentes. La perspectiva para los planes de renta fija es en todo caso bastante menos interesante que para los de renta variable.