El petróleo supera los 34 dólares y amenaza a la Bolsa
El mercado resiste, pero lo cierto es que el precio del petróleo está ya en los niveles de 1981-1983, que desembocaron en una crisis global de demanda. Goldman Sachs cifra en un 8% la corrección que los actuales precios pueden provocar en las Bolsas. La crisis del dólar y la recuperación de los resultados han servido hasta ahora de amortiguadores.
El precio promedio del barril de brent en lo que va de año es de 31,6 dólares por barril. En los últimos 25 años sólo hay tres precedentes de niveles similares: el comienzo de la guerra Irán-Irak, en otoño de 1980; la primera Guerra del Golfo, entre enero y febrero de 1991, y la crisis de 1999-2000, que derivó en manifestaciones masivas de agricultores y transportistas. Los efectos en Bolsa han sido, sin embargo, nulos. Los expertos argumentan que el auge macroeconómico y empresarial y la falta de alternativas a la renta variable no dejan otro remedio a los inversores que seguir confiando en el mercado de acciones.
'Una subida del 10% en el precio del petróleo por encima del consenso que es el escenario que ya se está dando restaría un 4,9% a la cotización de las Bolsas europeas a lo largo de los 12 meses siguientes', calcula Goldman Sachs. El banco suma este efecto directo a los que provoca el petróleo en el PIB global y 'el efecto combinado es de una reducción del 8%'.
Con estas premisas, el caos parecería estar servido en la renta variable, pero hay muchos factores que actúan de colchón. 'Desgraciadamente no hay muchas alternativas a la renta variable', explica Natalia Aguirre, de Renta 4. 'La liquidez no aporta nada, en los bonos ha habido un auténtico pinchazo y el mercado inmobiliario no puede mantener las tasas de crecimiento de los últimos años', explica la experta.
Bancos, eléctricas y automóviles, los sectores más castigados
Los efectos negativos del alza del petróleo se traducen en dos líneas principales. Por un lado, el encarecimiento termina repercutiendo en las gasolinas, todo un impuesto al consumo, que reduce la renta disponible. Por otro lado, la cadena de aumento de costes termina extendiendo la inflación a todos los sectores. El escenario resultante es uno de los peores posibles para los mercados, crecimiento débil e inflación alta, a lo que se añadiría una potencial subida de los tipos de interés, como medida de urgencia para atajar las presiones inflacionarias.
Los sectores tradicionalmente más castigados en Bolsa por el encarecimiento del petróleo son el financiero, el automovilístico y el de las empresas eléctricas. Hasta ahora, la cotización del petróleo ha pasado de largo, gracias al 'fuerte sentimiento inversor', afirma Felipe Mesía, de Self Trade. 'En Estados Unidos, el asunto clave es ahora la creación de empleo', añade el analista. 'En 2003, se venía de tres años de fuerte corrección y los efectos positivos de las reestructuraciones empresariales han permitido que el asunto del petróleo haya quedado al margen de momento', concluye el experto.
Lo que los analistas reconocen que sí ha introducido el auge del petróleo es prudencia. 'Los datos de confianza del consumidor y de los empresarios refuerzan el sentimiento comprador del mercado, pero hay mucha cautela', admite Mercedes Camacho, de Safei. Esta sociedad de valores calcula el rango del Ibex entre los 8.200 y los 8.500 puntos.
Los niveles de soporte son aprovechados para entrar en el mercado, antes de que los valores se encarezcan demasiado. Los niveles de resistencia disparan las ventas. Los inversores son conscientes de que la recuperación económica es precaria en Europa y se está consiguiendo a base de un fuerte apalancamiento. Su cautela frena el alza de los índices bursátiles.
La escalada se consolida
La escalada del barril de petróleo no tiene visos de ceder. El brent llegó a superar ayer los 34 dólares, el nivel más alto desde finales de 2000, después de que la OPEP ratificara su intención de elevar su objetivo de precios, actualmente entre 22 y 28 dólares.El propio presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, reconoció ayer de forma implícita que es improbable que los precios cedan de manera significativa a medio plazo.Los analistas coinciden con esta visión. 'Los futuros del brent sugieren que el precio registrará un promedio de 33 dólares por barril en el segundo trimestre y que cotizará sobre los 30 dólares el resto del año', señala el Centro de Estudios Globales de la Energía. El FMI resume los factores que apuntalan el precio: el retraso en la normalización de la actividad petrolera iraquí, un repunte más rápido de lo esperado en el consumo, la debilidad de los inventarios, la depreciación del dólar y una 'considerable' actividad especulativa.Precisamente, la OPEP usa los hedge funds como argumento para eludir su responsabilidad en la carrera del petróleo. El cartel fija entre tres y cuatro dólares por barril el sobreprecio creado por la especulación.