Marks & Spencer defrauda con otra caída de ventas
La crisis sigue cebándose en Marks & Spencer. Ayer la veterana firma británica anunció una caída del 3,4% en sus ventas hasta marzo. Las acciones perdieron un 4,5%.
La cadena de grandes almacenes Marks & Spencer continúa decepcionando a los inversores y ayer advirtió en un avance de sus resultados provisionales que las ventas en las 11 semanas hasta el 27 de marzo habían retrocedido un 3,4% en tiendas que llevan abiertas más de un año. Los analistas habían predicho un aumento del 1% tras las medidas de reestructuración puestas en marcha por la firma. Las acciones cayeron ayer un 4,5%.
La facturación en alimentación se redujo un 1,4%, mientras que las ventas de ropa, que suponen el 60% del total del negocio del grupo, bajaron un 2,5%.
Roger Holmes, consejero delegado de Marks & Spencer, reconoció que los resultados del trimestre habían sido decepcionantes y dijo que era probable que su grupo hubiera perdido algún punto en la cuota de mercado del 11% en beneficio de sus rivales.
Esta compañía, que reinó durante años en el negocio de distribución británico y gozó de una importante presencia internacional, sigue cediendo terreno a competidores como Next, que ofrece diseños más modernos y a mejor precio.
Marks & Spencer anunció hace unos días el recorte de 1.000 empleos en los próximos dos años que afectará a oficinas y sedes sociales en Londres, Manchester y Chester. La firma espera ahorrar unos 35 millones de euros anuales con esta medida que se suma a otros planes de recorte de gastos. La empresa ha recurrido asimismo a nuevos proveedores de países como India y Sri Lanka, donde la producción es más barata.
Sin embargo, los analistas creen que la reducción de gastos no van a ser la solución de todos los problemas de Marks & Spencer y acusan a la firma de no haber sabido adaptarse a un mercado cada vez más competitivo y dinámico y de mantener un diseño trasnochado a precios muy altos.
Algunos expertos como Ruper Trotter de Isis Asset Management, no descartan que algún grupo acabe comprando Marks & Spencer aprovechando su debilidad. Pero otros ven esta opción como bastante improbable. El empresario Philip Green, dueño de BHS y Arcadia, ya lo intentó hace años sin éxito.
Pese a los malos augurios que rodean a Marks & Spencer, la firma mantiene una previsión de beneficios brutos para el conjunto del ejercicio fiscal de 755 millones de libras, 1.080 millones de euros, lo que representaría un crecimiento del 4,7% con respecto al ejercicio precedente.
Cambios para superar el declive
Tras las sucesivas malas noticias dadas al mercado por Marks & Spencer, uno de los emblemas del comercio británico, muchos se preguntan si el declive de la veterana cadena de grandes almacenes es terminal. Inversores y consumidores están dando la espalda a una firma, que parece anquilosada en otra época.Pero la compañía dice tener listas medidas para sacudirse las telarañas como la renovación de la línea de ropa femenina a precios más baratos y la modernización de las tiendas. 'Nuestros clientes nos están diciendo que cambiemos o dejarán de comprar en nuestros establecimientos', señala Vittorio Radice, responsable textil. M&S ha puesto en marcha además la tarjeta de crédito Fidelity & More, tiendas de alimentación (Symply Food) y de muebles (Lifestore).