Nortel, Volvo y Bristol-Myers reformulan sus cuentas
La oleada de revisiones contables se extiende. Ayer coincidieron en admitir problemas con sus cuentas tres empresas de diferentes sectores: Nortel, Bristol-Myers y Volvo.
Nortel, el fabricante de equipos de telecomunicaciones, ha retrasado la publicación de sus cuentas, está revisando las cifras de costes y ventas desde el año 2000 y ha suspendido en sus cargos a dos directivos clave.
La farmacéutica Bristol- Myers también está revisando los resultados del cuarto trimestre, y de todo el año 2003, para corregir errores contables. Las nuevas cuentas recogen unos beneficios netos de 506 millones de dólares sobre unas ventas de 5.700 millones en el cuarto trimestre, comparados con unos beneficios de 429 millones y unas ventas de 5.600 millones de los que habló previamente.
Por su parte, Volvo ha revisado sus ventas del cuarto trimestre para admitir números rojos después de tener en cuenta la pérdida de valor de su participación en Scania.
Volvo registra así unas pérdidas de 383 millones de dólares en el cuarto trimestre, mientras que hace un mes decía haber ganado unos 150 millones en este periodo.
Atentos a
Nortel ha suspendido al jefe financiero, Douglas Beatty, y al controlador, Michael Gollogly. Beatty asumió su puesto en 2002, después de que despidiesen a su predecesor por violar las normas de inversión. Los inversores recibieron la noticia con preocupación.