El miedo al terrorismo internacional hunde a las bolsas mundiales
Los mercados no logran recuperar la normalidad, tras los atentados del 11-M. A la espera de que se confirme la autoría, las últimas detenciones en Madrid refuerzan el temor a una nueva escalada terrorista de la organización islámica Al Qaeda. El Ibex 35 ha perdido hoy un 4,2% y los 7.700 puntos. Mínimos anuales en Madrid y el resto de Europa mientras Estados Unidos experimentó una caída del Nasdaq del 2,2%.
La primera jornada de la semana ha marcado el hundimiento de los mercados bursátiles, que dan casi por hecho que la autoría de los atentados del pasado jueves en Madrid corresponde al terrorismo islamista radical. El temor a la confirmación de las sospechas de la conexión de la matanza del 11-M con Al Qaeda y a que se produzcan nuevos ataques en Europa occidental ha llevado al Ibex 35 a depreciarse un 4,2%, hasta los 7.699,10 puntos, nuevo mínimo anual.
La resaca electoral también ha pesado, como es habitual, en el desarrollo de la sesión. Los inversores recelan de cualquier cambio que suponga la formación de un nuevo Gobierno, sea de la índole política que sea. Cuando Aznar ganó los comicios de 1996, el principal indicador de la bolsa española acabó el día cayendo por encima del 5%. Por ello puede decirse que el Ibex ha aguantado mejor la llegada del líder del PSOE que la del entonces líder popular. Zapatero ha lanzado hoy a los mercados y al mundo empresarial el mensaje de que su Ejecutivo trabajará para que España crezca a través de una mayor productividad, esfuerzo en I+D e inversión en nuevas tecnologías.
Mínimos en el 'viejo continente'
En el resto de Europa, el recuerdo del 11 de septiembre, el desconcierto y el incremento de la seguridad por el miedo a que la tragedia se extienda por el continente presionan la negociación. La magnitud del miedo en Francfort y París se saldó con retrocesos del 2,7 y 2,4%, respectivamente. Por su parte, Londres amotiguó el impacto al 1,2%. En el mercado de divisas, el euro ha remontado ligeramente a 1,2238 dólares, frente a los 1,2192 dólares del viernes. Para los analistas, la moneda única aguarda tiempos mejores y se mantiene en un compás de espera tras los atentados.
Del otro lado del Atlántico, Wall Street teme por su seguridad. A pesar de la subida de la producción industrial en EE UU, que creció por sorpresa un 0,7% en febrero, la imagen de Al Qaeda provocó una depreciación en el Dow y el Nasdaq del 1,3% y el 2,2%. La cautela también provino de la presunción de que los atentados de Madrid y la debilidad de varios indicadores macro podrían llevar mañana, según los expertos, a que la Reserva Federal mantenga los tipos de interés en el 1%. También aguarda el mercado al discurso del responsable de la entidad, Alan Greenspan, sobre la situación de la recuperación económica.
La electricidad y el turismo, al rojo vivo
Mientras, en España siguen muy penalizados los sectores y valores relacionados con el turismo. NH y Sol Meliá -que cotiza en el mercado continuo- se han dejado, respectivamente, un 4,3% y un 5,5%. Amadeus cedió un 6% e Iberia un 5,9%. Todos los valores del Ibex lucieron números rojos, salvo Gamesa, siendo las pérdidas más elevadas para las eléctricas por el temor a que haya novedades en su marco regulatorio tras el cambio de Gobierno.
Endesa y Fenosa perdieron un 6,8 y un 5,2%, que Iberdrola logró limitar al 3,5. La banca también acusó fuertes descensos a punto de terminar el día. BBVA desandó un 5%, el Grupo Santander, un 4,4%, y Bankinter y Banesto se negociaron con bajas del 5,3 y el 4,3%.