Rato reclama la reforma de los convenios
El vicepresidente Rodrigo Rato volvió a reclamar ayer una reforma de los convenios colectivos que, según reconoce él mismo, 'no le gusta a casi nadie'.
En plena precampaña electoral, el vicepresidente económico del Gobierno, Rodrigo Rato, recuperó ayer el debate sobre la reforma de los convenios colectivos. Una reforma diseñada por el Ejecutivo para que saliera adelante hace dos años, vía negociación entre sindicatos y patronal CEOE, pero que retiró en última instancia del orden del día.
Rato aprovechó un acto de la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos para sacar a la palestra un asunto que no se encuentra oficialmente entre los puntos del programa del PP, que coordina Gabriel Elorriaga. 'No le gusta a casi nadie y puede tener un coste desde el punto de vista político, pero es necesaria esta reforma', dijo el vicepresidente. Poco después, en un almuerzo organizado por ABC en el Casino de Madrid, aclaró que ésta es una de las reformas laborales que, en su opinión, será preciso aprobar en los próximos cuatro años.
Entre ellas, destacó una revisión de la estructura de costes de las empresas para evitar la indexación de los salarios y del resto de rentas, en función de variables como el IPC. 'La fijación de costes debe evolucionar, más bien, en función de la competitividad de cada empresa; al mismo tiempo, se debe ir a fórmulas de salarios diferidos y a participación de los trabajadores en los beneficios de las empresas', comentó.
En 2001, el Gobierno ya colocó sobre la mesa la eliminación de la prórroga automática de los convenios vencidos y que aún no se hayan negociado, algo que no gustó a los sindicatos, sobre todo, a UGT.
Junto a la reforma de los convenios, Rato se refirió a otros objetivos como reducir la temporalidad en los contratos, mayores incentivos a la formación ocupacional y al empleo femenino, como instrumentos para lograr el pleno empleo 'en 4 o 6 años'.
Comercio Las importaciones crecieron más que las exportaciones en 2003
El sector exterior es una de las piezas claves de la recuperación de la economía. El vicepresidente adelantó ayer que las exportaciones españolas crecieron un 6,2% en 2003 pero las importaciones lo hicieron a un 7%, fruto de la pujanza de la demanda interna frente a la atonía de los mercados internacionales, sobre todo, de los países de la UE.La cohesión del mercado interno fue defendida por Rato, 'frente a quienes quieren fragmentar el mercado nacional en áreas regionales'. El vicepresidente valoró la 'estabilidad política' de los últimos 25 años, 'sin cambios constitucionales como plantea el PSOE', como pilar fundamental para las reformas económicas 'que deben continuar en el futuro'.