Directivos de Wal-Mart se rascan el bolsillo para los republicanos
Wal-Mart Stores fue la empresa más generosa con los congresistas de Estados Unidos durante el pasado año, por delante de United Parcel Service, que hasta entonces ocupaba el primer lugar. El Comité de Acción Política de Wal-Mart repartió 960.000 euros entre 222 legisladores y candidatos. Este organismo tiene la posibilidad de donar 4.000 euros a los candidatos federales mediante deducciones voluntarias en las nóminas de sus gerentes. Estas cantidades dirigidas a los candidatos del Congreso aumentaron el 14% sobre los dos ejercicios anteriores, según las cifras recogidas por Politicalmoneyline.com, un grupo que realiza el seguimiento financiero de las campañas políticas.
Wal-Mart, con sede en Bentonville (Arkansas), es la primera compañía estadounidense por ventas, tiene más de 1,1 millones de empleados, la mayor flota de camiones del país y es el mayor vendedor de alimentos. Sus donaciones han ido paralelas a la expansión de su negocio, que en el primer mes del año crecieron un 5,7% respecto al año anterior. 'A medida que aumentaba su actividad, su interés en crear nexos con los miembros del Congreso ha ido en aumento', según Jay Allen, tesorero del comité y vicepresidente de asuntos corporativos.
'Tenemos una gama de intereses muy amplia, y hay muchas cuestiones que pueden afectarnos', asegura Jay Allen, quien añade que 'es una oportunidad para establecer relaciones, y ése es el propósito real de nuestro comité'.
Este grupo de presión creado por la propia compañía ha ido creciendo de forma paulatina. Cuando la empresa abrió su oficina en Washington en 1999 contaba con una persona, y ahora son seis las que componen la plantilla de este lobby, además de tener en la reserva a la agencia Patton Boggs.
La empresa asegura que su comité realiza donaciones a los legisladores 'que están a favor de las empresas'. Los ejecutivos de Wal-Mart apoyan a los republicanos, ya que el 83,8% de sus contribuciones fueron a parar a manos de este partido. Concretamente, el presidente, Rob Walton, donó 20.000 euros, la cantidad máxima permitida por ley, al comité nacional republicano del Congreso el año pasado. Paralelamente, el vicepresidente Thomas Coughlin, y el director financiero, Thomas Schoewe, hicieron lo propio con George Bush y no cedieron un centavo a los demócratas, según revelaciones de la Comisión Federal Electoral.
Entre los los legisladores que figuran en la lista de receptores de los donativos de Wal-Mart figuran el presidente de la Cámara de Representantes, Dennis Hastert, republicano de Illinois que recibió 8.000 euros; el senador Kit Bond, republicano de Misuri que recibió otros 8.000 euros, y Richard Burr, republicano de Carolina del Norte que está haciendo campaña para ocupar el lugar en el Senado del candidato presidencial demócrata John Edwards, que también recogió 8.000 euros. No obstante, el representante republicano de Georgia Phil Gingrey fue quien mayores dádivas recibió de Wal-Mart: 14.000 euros durante el año pasado.
Las donaciones políticas han ido en aumento al mismo ritmo que la expansión del negocio de la primera compañía de EE UU por ventas