La oferta llega en medio de la lucha por el control del grupo
La sorprendente opa lanzada por Comcast ayer sobre Disney llega en un momento delicado que estaba por alcanzar su cumbre en la junta de accionistas del 3 de marzo, en la que algunos accionistas liderados por Roy Disney pedirán la dimisión de Eisner y tres de sus consejeros. El paisaje ahora ha cambiado, pero la batalla de Disney, el septuagenario sobrino del fundador de la compañía que dejó su puesto en el consejo el 30 de noviembre junto con Stanley Gold, y la dirección, liderada por Michael Eisner, continúa debilitando la situación de éste.
Y es que han pasado muchos años y muchas peleas desde que en 1984 el propio Disney enrolara a Eisner y lo llevara a la dirección para dar la vuelta a la legendaria compañía de entretenimiento. Desde entonces los estilos de gestión que cada uno asumía se han ido separando hasta dar lugar a la ruptura.
Roy Disney acusa a Eisner de algo en lo que coinciden muchos analistas de Wall Street, que el ejecutivo ha acumulado mucho poder, que el consejo tiene problemas de independencia o que no hay un plan para la sucesión de su líder a quien por cierto echa en cara, igual que al consejo, haber cobrado más de 68 millones de dólares en los últimos tres años cuando la compañía estaba castigada en Bolsa.
Los accionistas se enfrentarán en la junta del 3 de marzo
Pero el sobrino de Walt Disney lleva su crítica más allá de estos asuntos y dice que desde que se abrió Eurodisney en las cercanías de París se produjo un cambio en la empresa que se ha ampliado y no le ha gustado y es que Eisner piensa antes en el 'dólar rápido' que en el largo plazo.
Según Roy Disney, el parque temático europeo tendría que haberse situado en Cataluña y no haber cedido a las ayudas que ofreció el Gobierno francés. En este sentido, Disney arremete contra la política de parques temáticos 'baratos' que últimamente ha abierto o va abrir la empresa.
Además, pone en duda la rentabilidad de la compra de la cadena ABC en 2001 (3.000 millones más 2.200 de asunción de deuda) y el escaso éxito de su programación prime time, además de cargar las tintas por la pérdida de talento humano en la empresa, con el cierre de estudios de animación o la fuga de creativos a la competencia, y su imposibilidad de tener una relación constructiva con socios tan valiosos como Pixar, responsable de éxitos como Buscando a Nemo, con quien ha roto relaciones. Eisner prepara ya su defensa ante la que se prevé tumultuosa junta.
El consejo de Disney mandó ayer una carta a la SEC acusando a Disney y Gold de engañar a los accionistas. Esgrimen los buenos resultados de la empresa en los últimos trimestres y las previsiones de fuerte crecimiento para 2004.
Por otro lado, Eisner está multiplicándose en reuniones con inversores y analistas en las últimas semanas, con asociaciones de accionistas, a los que se les ha hecho llegar los últimos cambios en el consejo y de gobierno corporativo y del inicio de las conversaciones para preparar el relevo de Eisner cuyo contrato acaba en septiembre de 2006. æpermil;ste se defiende y acepta parte de las críticas, pero ahora se le abre otro frente.
La cartelera, un respiro para la multinacional de la animación
Michael Eisner no las tenía consigo cuando vio por primera vez las aventuras de Nemo e incluso llegó a comentar en el consejo que la empresa se tenía que preparar para un año complicado por las expectativas que había en la película. Ahora Mickey tiembla ante el perfil que crece del pez. La película de Pixar para Disney Buscando a Nemo sigue sumando a una caja que ya rebasa los 800 millones de dólares.Tanto Nemo como Piratas del Caribe permitieron a Disney ser el primer estudio que llegó a los 3.000 millones de ingresos por taquilla en 2003 pese al fracaso de Veronica Guerin o Mansión encantada. Para 2004 Disney tiene en cartera sus apuestas fuertes con Rey Aturo, The life aquatic, Ladykillers, de los hermanos Coen; The village, de M Night Shyamala (creador del Sexto sentido) e Hidalgo.
Una contrapágina para arengar a los accionistas
Los accionistas de Disney tienen una referencia en la web para ponerse al día de la disidencia creada por Roy Disney y su socio Stanley Gold más allá de acudir a los esporádicos informes que se remiten a la más complicada página en internet de la SEC.Www.savedisney.com llama a los accionistas bajo el lema 'Join our fight' (únase a nuestra lucha) en una página muy elaborada en la que se proyecta la sombra y la mano de Mickey, el icono de la empresa. Disney pide a los socios que no se vayan de la sala de juntas sin pedir la dimisión de Eisner, a quien en última instancia señala como el protagonista de 'aventuras fallidas' y esquemas de negocio que 'reciclan en vez de innovar'. Disney reclama una batería de preguntas a Eisner y el consejo, entre otras: por qué creen que ellos están engañando a los socios: 'Que lo expliquen'. 'Qué ha pasado con la cultura Disney, lo que antes era una familia feliz ahora parece un reino feudal de la Edad Media', advierten a los internautas ambos disidentes.Gold y Disney, que han manifestado su desacuerdo con la ruptura de las negociaciones con Pixar, obtuvieron del presidente de ésta, Steve Jobs, amplia munición para cargar las tintas contra Eisner, y así lo recogen en sus críticas. En una reunión con analistas Jobs criticó al presidente de Disney por su falta de visión y dijo que le pone 'enfermo' que haga segundas partes de sus obras.