Nissan conduce a Renault a un beneficio récord de 2.480 millones
El gigante francés del motor anunció hoy que cerró 2003 con unos beneficios netos de 2.480 millones de euros, un 26,8% más altos que los registrados en 2002 y que marcan un nuevo récord de ganancias.
El constructor automovilístico francés Renault ganó 2.480 millones de euros en 2003, un 26,8% más que en 2002, gracias al fuerte crecimiento del resultado de su socio Nissan. La contribución de la casa japonesa, de la que Renault controla más del 44%, al resultado neto del fabricante francés se situó en 1.705 millones de euros, y la del grupo sueco AB Volvo en 175 millones.
Según el comunicado emitido hoy por el fabricante, su margen de explotación bajó un 5,5% en 2003 sobre el año anterior, hasta los 1.402 millones de euros, aunque subió en el segundo semestre con respecto al primero, gracias al "éxito de nuevos modelos", como las nuevas versiones del Megane y del Espace. En un entorno poco favorable en 2003, marcado por la apreciación del euro y el retroceso del mercado automovilístico francés, Renault aumentó un 3,8% su volumen de negocios, hasta los 37.525 millones de euros, y "estabilizó" su parte del mercado mundial en un 4,1% al comercializar 2,39 millones de vehículos, un retroceso del 0,7%.
En el mercado automovilístico europeo -que bajó un 1,6%-, el grupo conservó su puesto de primera marca en turismos y en vehículos utilitarios con cuotas de mercado del 10,6 y 15,1%, respectivamente. Fuera de Europa occidental, el grupo continuó su desarrollo con un aumento de ventas del 9%, gracias al "dinamismo" de los mercados en Europa central, oriental y ruso, la reactivación en Turquía (+127%) y el aumento de ventas de Dacia (+18,8%). Pese al retroceso del mercado surcoreano, Renault Samsung Motors resistió "bien" y mejoró su cuota del mercado de turismos, indicó.
Optimismo moderado para 2004
Sobre las perspectivas para 2004, Renault prevé una progresión del mercado automovilístico ínfima en Europa y leve en los principales países fuera de Europa en que está implantado. En este contexto de mercado poco favorable, Renault se beneficiará en 2004 del despliegue "completo" de la familia Megane y de una mayor competitividad, continuará su desarrollo internacional y buscará el crecimiento de las ventas fuera de Europa occidental.
Si los niveles de cambio entre las grandes monedas no se alejan "significativamente" de la situación actual, el grupo se fija como objetivo alcanzar en 2004 un margen de explotación de en torno a un 4,5% de su volumen de negocios. Renault prevé igualmente "una nueva progresión" de su resultado neto, señaló el grupo.