El 'caso Parmalat' provoca en Italia suspensiones bursátiles en cadena
La desconfianza se ha extendido entre los inversores e incluso hay quien ha aprovechado el ambiente de suspicacia para infundir rumores y hacer negocio. Los supervisores tratan de atajar la situación y, de momento, han suspendido la cotización de cinco empresas en la Bolsa de Milán.
Finmatica ha sido una de ellas. Las acciones del grupo de software no se han negociado en los últimos cuatro días, después de que el supervisor iniciara una investigación sobre sus cuentas por sospechas de irregularidades.
El consejo de administración de la empresa de programas informáticos, entre cuyos clientes se encuentran Morgan Stanley y Assicurazioni Generali, así como el comité de auditoría en pleno están bajo escrutinio por la fiscalía de Brescia, donde tiene su sede. Debido a las pesquisas, el presidente, Pierluigi Crudele, y el consejero delegado, Fabio Bottari, anunciaron el jueves su dimisión, aunque expresaron su 'convicción de haber operado respetando la ley y en interés de la compañía y accionistas'.
Las autoridades investigan las cifras presentadas en 2002 y 2003 por posible ocultación de pérdidas por valor de 'varios millones de euros' relacionadas con la fuerte deuda de la empresa.
No ha sido la única firma bajo sospecha. Stayer, empresa de componentes electrónicos; NGP, química; Montefibre, grupo de fibras textiles, y Tecnodiffusione Italia, fabricante de ordenadores, son otras de las compañías que acaparan la atención y cuyos títulos han dejado de cotizar en los últimos días.
Denuncia de Tiscali
Stayer ha rechazado las acusaciones de su auditor, Deloitte & Touche, el mismo que certificó las cuentas de Parmalat, de que no incluyó ciertos acuerdos de patrocinio en sus resultados de 2003. El supervisor investiga lo sucedido y la acción no ha cotizado en dos días.
Por su parte, los títulos de Tecnodiffusione cedían ayer el 10,2% antes de su suspensión. El jueves, bajaron un 10,6%. La empresa está negociando una reestructuración de la deuda con los acreedores, que ya han renunciado al cobro de cinco millones en intereses.
El fantasma ha provocado, asimismo, un incremento de la susceptibilidad de los inversores, un clima de desconfianza que ha sido aprovechado para hacer circular rumores. æpermil;ste ha sido el caso de Tiscali. El tercer mayor proveedor de servicios de internet de Europa ha presentado una denuncia ante la fiscalía de Milán porque algunos 'desconocidos' han hecho circular información falsa sobre posibles problemas contables en la empresa.
Hace una semana, el valor retrocedió un 9% cuando se especuló que podría tener problemas legales y que su auditor, Deloitte & Touche, había encontrado ciertos problemas en la revisión de sus cuentas de 2003. 'La empresa espera que aquellos que se han beneficiado de las acciones especulativas e ilegales sean identificados y castigados'.
Se suicida un contable que declaró como testigo
Un contable de Parmalat, Alessandro Bassi, se suicidó ayer al arrojarse desde un puente de una carretera cerca de Parma. Bassi, de 41 años, fue colaborador de Fausto Tonna, ex director financiero y, posteriormente, fue secretario de Luciano del Soldato, que sucedió a Tonna como director financiero. El contable fue interrogado el martes por la fiscalía, pero sólo como testigo y no como imputado.Mientras, la policía registró ayer la sede de Deutsche Bank en Milán. La fiscalía se ha centrado en los bancos que colocaron las emisiones del grupo o que gestionaron los préstamos para saber si conocían el estado real de la firma. Por su lado, Calisto Tanzi, fundador del Parmalat, fue trasladado al hospital desde la cárcel para ser sometido a un chequeo médico por sus problemas cardiacos. Según fuentes del centro, permanecerá en observación.