La comunidad china celebra el año nuevo
Cuando hoy por la noche los relojes terminen de dar las doce campanadas habrá comenzado el nuevo año chino. Gran parte de la cultura oriental dirá adiós al año de la cabra y hola al año del mono.
El primer día de este ciclo coincide con el 22 de enero y el último será el 8 de febrero de 2005. Pero no siempre es así puesto que las fechas se fijan por un ciclo lunar de 12 años. A cada año se le asigna un animal, este año el del mono.
Para los 56.000 nacionales chinos censados en España, hoy y mañana son días de fiesta, la Fiesta de la Primavera, según su tradición. Aunque en su China natal las celebraciones duran más días.
La bienvenida oficial al nuevo año tuvo lugar el pasado viernes en Madrid en la Casa de América y contó, entre otros, con la presencia de la ministra de asuntos exteriores, Ana Palacio. Pero los festejos populares tendrán lugar en las calles. Por ejemplo, en Madrid, a partir de las 13.30 horas de hoy, un desfile de máscaras y dragones saldrá de la plaza de Cabestreros en Lavapiés y recorrerá la calle Mesón de Paredes. La fiesta continuará por la noche en la discoteca La Riviera (paseo de la Virgen del Puerto) a la que asistirá el embajador Qiu Xiaoqi. En el Casino Gran Madrid (Torrelodones) el día 29, el chef del restaurante Tse-Yang preparará una cena especial abierta a todos los que quieran acercarse. En Barcelona, algunas de las celebraciones tuvieron lugar ayer en el Auditori. Como dijo el viernes Qiu Xiaoqi, 'que este año todos tengan salud y buen comercio'.
La bolsa
El año del mono es el de la inteligencia, la flexibilidad y la sabiduría y augura bonanza económica. Según los adivinos chinos, este año será el del auge de los mercados bursátiles. Pero el mono es también travieso y puede traer trastornos políticos, sobre todo para los nacidos en el año del perro, como George W. Bush. 'La reputación del perro podría estar en juego este año', afirma la astróloga Shelly Lu, informa Reuters.