Más control sobre paraísos fiscales
Bruselas prefiere una respuesta prudente al escándalo Parmalat porque, según señaló ayer el comisario de Mercado Interior, Frits Bolkestein, una legislación apresurada y desproporcionada 'puede hacer más daño que bien'. Aun así, el comisario indicó ayer en Bruselas a los ministros de la UE que en el futuro puede ser conveniente extremar el control sobre áreas que hasta ahora se habían beneficiado de una cierta relajación.
La Comisión desea, en concreto, que se exija a las empresas cotizadas en Bolsa que detallen en la contabilidad las operaciones mediante mecanismos financieros especiales o realizadas a través de paraísos fiscales. Bruselas también coloca en el punto de mira a las agencias de rating, cuyo fracaso a la hora de predecir las dificultades de solvencia de las empresas ha sido tan patente o más como el de las propias auditoras.
Bolkestein detalló ayer a los ministros de Economía los puntos más destacados del futuro texto sobre auditoría que, además de la responsabilidad total de un solo auditor, incluirá normas estrictas sobre la calidad mínima exigible en las revisiones contables.
Bolkestein también indicó ayer que el fraude de Parmalat indica la necesidad de fortalecer la cultura de gobierno corporativo en Europa. 'Hay que acelerar las normas que exijan que todos los directores del consejo de administración de una empresa asuman la responsabilidad colectiva por las cuentas de la compañía'.
Bruselas también quiere exigir que los grupos empresariales faciliten información detallada sobre su estructura y las relaciones entre las diversas unidades.
Tetra Pak
Tetra Pak, el fabricante sueco de envases de cartón, publicó ayer el resultado de la investigación sobre los pagos y descuentos realizados por sus 23 filiales a las empresas locales de Parmalat, incluida Clesa. Según la compañía, todos los pagos fueron correctos.