Wall Street ignora la creciente amenaza de terrorismo y supera los 10.300 puntos
El ambiente navideño se apoderó de los mercados de EE UU. Los índices apenas se movieron en una sesión de escaso volumen de negocio y sin referencias económicas. En el fin de semana el nivel de alerta ante posibles ataques terroristas se elevó a naranja después de cuatro meses en amarillo. La noticia tuvo escasa incidencia en el mercado aunque las aerolíneas sí se resintieron. El Dow Jones (+0,58%%) y el S&P 500 (+0,39%) avanzaron hasta los máximos del año mientras el Nasdaq se recuperó de una caída inicial para avanzar un 0,25%.
Estados unidos Bajan las aerolíneas
El miedo al terrorismo sí penalizó a las aerolíneas. America West (-2,14%), American Airlines (-1,17%) retrocedieron aunque el castigo fue moderado.
Wal Mart también centró la atención después de advertir que las ventas de diciembre se situarán en la banda baja de sus estimaciones. La noticia, sin embargo, apenas afectó al sector. La compañía, en concreto, ganó un 1%.
Ford dio motivos de alegría. Subió un 10,7% después de elevar la estimación de beneficios para el año y tras anunciar un acuerdo con Vistion para asumir parte de sus costes de jubilación.
Europa Parmalat cae el 63%
El escándalo que rodea a Parmalat marcó la jornada bursátil en Europa. La Bolsa de Milán, afectada por la caída de los bancos italianos, cedió un 1,77%. En el resto de la región las ganancias moderadas y las caídas leves se entremezclaron. Así, el Cac cayó un 0,17%; el Dax se dejó el 0,55% mientras que el Ibex (+0,02%) o el Footsie (+0,27%) avanzaron con timidez.
Parmalat sorprendió al mercado el pasado viernes cuando develó un agujero contable de 4.000 millones de euros, que según la prensa italiana puede llegar a alcanzar entre 7.000 y 10.000 millones.
El escándalo alcanzaba nuevas dimensiones ayer tras conocerse que la fiscalía de Milán ha incluido en la investigación por fraude contable al ex presidente del grupo Parmalat, Calisto Tanzi, y otras 20 personas, entre ellas los miembros del consejo de administración.
La compañía, al borde de la quiebra, cayó un 63% una vez levantada la suspensión de la cotización, lo que situó su capitalización en 89,7 millones. Los bancos relacionados con la crisis de Parmalat también sufrieron fuertes bajadas por temor a que la compañía ponga en peligro 900 millones de euros en créditos. Capitalia cayó el 6%; Fideuram, un 3,96%, Banca Nazionale del Lavoro, el 5,47% e Intesa, un 3,37%.
Las empresas de distribución y las exportadoras también estuvieron entre las azotadas del día.