Las dotes de mando de los nuevos ejecutivos
Es el momento de salir a escena. Llevan años preparándose para emprender su carrera profesional y no les importa cargar sobre sus espaldas la losa que supone tener la responsabilidad de emprender su propio negocio. Así opinan los alumnos de segundo curso MBA de la escuela de negocios IESE, que esta semana han presentado sus proyectos en el Fórum de Nuevas Empresas 2003. Su propósito: lograr que su iniciativa empresarial vea finalmente la luz tras atraer el interés de los 65 inversores privados que asistieron al encuentro de la firma de capital riesgo del IESE, Finaves.
Emprendedores natos, están impacientes por dejar atrás la teoría y por fin pasar a la práctica. Prefieren impulsar nuevos proyectos y contar con un equipo de colaboradores a los que motivar antes que trabajar para otros. 'Me gusta tener la oportunidad de desarrollar mis propias ideas', explica Yolanda Serra, encargada de marketing de Flower Power, una red de floristerías que quieren implantar en las principales ciudades españolas. 'En cierta manera, los estudiantes tenemos la responsabilidad de crear trabajo y aportar nuevas ideas al mercado', apunta su compañero, responsable de operaciones, Tobias Fuhrmann.
Novedosas ideas, pero racionales. A diferencia de otros años, los alumnos del IESE ya no se han centrado en apostar por las nuevas tecnologías. Y es que las llamadas puntocom ya no captan el interés de los estudiantes del IESE.
'Si se da una estrategia errónea, el emprendedor no queda marcado, se valora su iniciativa', asegura Pedro Nueno
Timo Buetefisch, impulsor del proyecto Flower Power, reconoce que estando bajo las órdenes de otros se adquieren muchos conocimientos, pero 'lo realmente interesante es poder ponerlos después también a prueba'. Crear una nueva empresa y lograr que su modelo de negocio sea viable y se alcancen los objetivos previstos en su plan de negocio inicial es una meta complicada, dicen.
Serra puntualiza que 'existe el riesgo, pero vale la pena correrlo, porque el reto es muy gratificante'. Este punto de vista lo comparte Manuel Vidal Quadras, que junto con otros tres compañeros quiere desarrollar un centro turístico de relax con aguas termales, salón de belleza y hotel en la comarca leridana de La Cerdanya. Su misión es, si cabe, aún más ingente y ambiciosa: pretenden que su proyecto sirva para dinamizar la economía de la zona y promocionarla turísticamente. 'Hemos de correr el riesgo, tenemos una edad en la que nos podemos permitir tener un fallo', dice con entusiasmo su socio, David Carbó.
Pedro Nueno, profesor del IESE y coordinador del Fórum, también opina que sus alumnos están actualmente más motivados por crear su propia compañía y no ocupar un cargo directivo en otra en la que no hayan ideado su puesta en marcha. 'Hay más iniciativa porque hay menos riesgo, es más fácil encontrar apoyos', explica.
Otro punto a favor es que si se da una estrategia errónea en la gestión del proyecto, 'el emprendedor no queda marcado, se valora su iniciativa', asegura Pedro Nueno, quien también destaca de los alumnos 'su disposición y compromiso en sacar adelante el proyecto', e indica, que aunque quizá algunos no vean la luz, 'lo importante es que reflexionen sobre los parámetros implicados en la creación de una empresa'.
Los alumnos MBA apuestan por crear equipos directivos integrados por miembros de diversos países. De hecho, aproximadamente el 70% de los alumnos de la escuela de negocio son extranjeros. 'Es una manera enriquecedora de aportar visiones y experiencias distintas que sin duda ayudarán positivamente a la marcha de la futura compañía', apunta Fuhrmann. Además, es una manera de que los directivos puedan introducir en España proyectos que han tenido éxito en sus respectivos países de origen. No copiar, pero sí adaptar buenas ideas a las peculiaridades de nuestro mercado. Los nuevos directivos saben el peso que tiene el saber gestionar adecuadamente los recursos humanos. Les preocupa cómo motivar al personal, ya que son conscientes de que los trabajadores juegan un papel clave en la bonanza de su negocio. 'Nuestra meta es lograr que vivan el proyecto tanto como la propia dirección, que se sientan a gusto con la tarea que están desempeñando', apunta Vidal Quadras.
La nueva hornada de ejecutivos apuesta por crear equipos formados por varias personas en las que cada uno tenga sus tareas bien definidas. Creen que es clave la especialización en distintas áreas, pero a la vez compartir entre todos los conocimientos y estudiar las distintas estrategias a seguir. También es importante que en la dirección se combine personal ya experimentado en el mundo laboral con profano. 'Dos compañeros tienen experiencia en consultoría, han analizado muchos negocios y saben cuál es su funcionamiento', dice Serra, de Flower Power.
Otro factor para que su puesta de largo en el mundo de los negocios resulte exitosa es rodearse de expertos con una amplia trayectoria en el sector donde quieren actuar. El equipo de Red Azul, una compañía cuya actividad es la de adquirir corredurías de seguros, se apoya en especialistas a los que preguntar dudas y que les van a acompañar en sus primeros pasos. Elena Betés, una de las impulsoras de la compañía, indica que han logrado convencer a ex altos cargos de aseguradoras como Axa o Skandia o miembros de la patronal aseguradora, Unespa.
Tras idear minuciosamente sus respectivos planes de negocio, saben que el siguiente paso es esforzarse en comunicarlo. 'Muchas veces una gran idea no tira hacia adelante por hacer uso de una comunicación errónea', apunta Stefan Settels, uno de los impulsores de Business Services, una compañía que pretende especializarse en la producción de presentaciones de proyectos empresariales.
YOLANDA SERRA, flower power: 'Pienso en el reto, no en el riesgo'
Pregunta ¿Dar forma a sus propias ideas o trabajar para las de los demás?Respuesta Sin duda las propias, ya que te permite aportar a la sociedad, al mercado, algo que hasta ese momento no existía, lo que resulta muy gratificante.P. ¿Es fundamental contar con una experiencia previa para asegurarse el éxito del proyecto?R. Es importante. Nuestro equipo está formado por personas con experiencia en consultoría que se complementa con mi trayectoria en el mundo del retail. Además, también ayuda que dos de mis compañeros hayan trabajado anteriormente para otras start up.P. Es, entonces, una manera de ir encaminados a un éxito asegurado.R. Han asistido a la puesta en marcha de un gran número de negocios, con lo que saben qué aspectos suelen fallar y en los que no hay que poner atención.P. ¿Riesgo o reto?R. Creo que hay que plantearse estas oportunidades de manera positiva. Pienso en el reto, no el riesgo que puede conllevar.P. ¿Las ideas son exportables o quedan circunscritas a un determinado territorio?R. El equipo de Flower Power está formado por integrantes de diversas nacionalidades que han tenido la oportunidad de ver cómo han surgido ideas que han triunfado entre el público de sus respectivos países. Podemos también aplicarlas aquí tras constatar que funcionan.
ELENA BETæpermil;S, red azul: 'Aprendemos rápido y a golpes'
Pregunta ¿Qué riesgos conlleva apostar por un proyecto empresarial propio?Respuesta En las clases hemos visto más de un millar de casos teóricos. Es el momento de comprobar en nuestra propia piel que esos conocimientos que hemos adquirido pueden aplicarse y de una manera efectiva. Vale la pena intentarlo y superar los miedos.P. Red Azul ofrece a posibles inversores rentabilidades del 25%, frente al resto que ofrece superiores. ¿Pecáis de prudentes?R. Siempre es mejor poder ofrecer a los colaboradores mejores resultados de los previstos en un principio, que no luego tener que rectificar sobre una promesa de beneficios que al final no se alcanzaron.P. ¿Qué habilidades debe tener un buen directivo que pone en marcha su propio negocio?R. En principio una serie de valores, como una fuerte convicción con el proyecto que va a emprender. De todas maneras, creo que las capacidades se adquieren con la experiencia. Estamos acostumbrados a trabajar en un entorno difícil, en el que hemos de reaccionar al instante.P. ¿Qué importancia tiene saber trabajar en equipo?R. Es fundamental, como ha de ser una constante capacidad de aprendizaje, de saber cómo dar un paso u otro. Trabajando todos juntos se aprende, permite que el proceso sea más rápido. Aprendemos rápidamente y a golpes.
MANuEL VIDAL QUADRAS, La cerdanya spa resort: 'El trato con el inversor es un noviazgo'
Pregunta ¿No les da respeto poner en marcha un nuevo proyecto en solitario?Respuesta Es evidente que corres un riesgo, pero creo que vale la pena por los resultados que puedes obtener y lo positivo que puede resultar para tu carrera.P. ¿Cómo se fideliza al personal?R. Básicamente hay dos vías, la remuneración y el trato personal.P. ¿Cuál es el perfil adecuado de un empleado de La Cerdanya Spa Resort?R. Sobre todo ha de ser flexible y tener capacidad para adecuarse a los gustos del cliente, tratándose de un negocio en el que lo primordial es el bienestar de quienes nos visiten. Ante todo, ha de gustarle dar servicio a los demás.P. ¿Cuál es la clave para que un proyecto tire hacia adelante con éxito?R. Trabajar, trabajar y trabajar, esa es la clave. Además de contar con los conocimientos necesarios en todos los ámbitos, desde marketing a finanzas.P. ¿Hasta qué punto la dirección debe atender las exigencias de sus inversores?R. En algunos aspectos se han de producir necesariamente concesiones, hay que tener en cuenta que te juegas su dinero, el tuyo, y de alguna manera tu carrera.P. ¿Y si se dan diferencias entre los planteamientos de uno y de otros?R. Yo creo que la relación con el inversor es como la de un noviazgo o un matrimonio. Hay un trabajo conjunto, aunque si se dan en muchas ocasiones opiniones contrapuestas, hay que concluir que no se debe seguir adelante.