Los conservadores alemanes proponen un IRPF máximo del 36%
Friedrich Merz, experto en Finanzas de la Unión Cristianodemócrata (CDU), defendió ayer en el congreso de su partido, que se celebra en Leipzig, un concepto de sistema fiscal simplificado, basado en tres únicos tipos impositivos, como puntal del ambicioso programa de reformas con que los conservadores aspiran a recuperar el poder en Alemania.
'El actual modelo no es reformable, porque a lo único que puede contribuir es a hacer aún más caótico el sistema impositivo', argumentó Merz, en la segunda jornada del congreso de la CDU, en Leipzig (este del país), en alusión a la reforma fiscal propuesta por el Gobierno rojiverde.
La simplificación del sistema fiscal no debe demorarse más, prosiguió el experto financiero y vicepresidente del grupo parlamentario conservador, quien acusó al Gobierno de haber bloqueado, en sus tiempos en la oposición, el concepto elaborado en esa dirección por el entonces Ejecutivo conservador-liberal.
Su concepto se basa en la sustitución del actual modelo y sus múltiples posibilidades de desgravación y privilegios por una fórmula con tres únicos tipos impositivos de 12%, 24% y 36% de los sueldos. 'Debemos recuperar el principio de dar el mismo tratamiento a todos los ingresos', defendió el político conservador.
Las excepciones a ese principio equilibrado serían el apoyo a las familia (para lo que se prevé una exención fiscal de 8.000 euros anuales por miembro familiar), los ahorros de los jubilados y los donativos a organizaciones sin ánimo de lucro, aunque Merz reconoce tener reparos en esto último.
El concepto fiscal de Merz es el segundo puntal del plan de reformas de la CDU tras el relativo al sistema social defendido ayer por el ex presidente del país Roman Herzog. La propuesta de Herzog se basa asimismo en un cambio radical en las cotizaciones a la seguridad social, que no se fijarían en función de los sueldos del contribuyente, ya que habría una cuota única con la salvedad de un correctivo fiscal para las familias de ingresos bajos.
El plan de Herzog fue aprobado por la CDU por práctica unanimidad (sólo hubo unos pocos votos en contra de los 1.000 delegados).
Finanzas Sociales
La financiación de la Seguridad Social experimentará un cambio radical, ya que las aportaciones de los asegurados no se establecerán en función de los sueldos, sino que habrá una cuota unitaria, con la aplicación de reductores para las familias con rentas más modestas.