España abre el FAD a empresas extranjeras en países pobres
El secretario de Estado de Comercio, Francisco Utrera, presentó ayer en el Senado la reforma de la Ley del Fondo de Ayuda al Desarrollo (FAD), que entrará en vigor en 2004 y que en líneas generales recoge las sugerencias aportadas por el sector empresarial, especialmente a través del Club de Exportadores y de la CEOE.
La reforma legal se introducirá a través de una enmienda del Grupo Popular a los Presupuestos Generales del Estado y entre las novedades destaca la autorización para conceder donaciones y ayuda desvinculada a los países menos desarrollados.
Esta modificación significa que, a partir del año próximo, los proyectos financiados por el FAD español en los 25 países más pobres del Planeta dejaran de estar ligados a empresas españolas y se abrirán a las sociedades extranjeras, de acuerdo con las recomendaciones de la OCDE de mayo de 2001.
La relación de países afectados incluye a la mayoría del África Subsahariana y algún Estado asiático como Afganistán o Bangladesh, en los que la presencia española es casi nula. Para el resto de países en vías de desarrollo se mantiene la vinculación de la ayuda a la contratación de empresas españolas.
Importante es también el cambio por el que se transfiere a los países beneficiarios de los créditos las decisiones de adjudicación de los contratos, con objeto de favorecer a las empresas que identifican los proyectos.
La Ley de Presupuestos dota al FAD con 520 millones de euros para el año próximo, mientras que las autorizaciones aprobadas por el Consejo de Ministros durante el ejercicio en curso se elevan, hasta el 31 de octubre, a 550,5 millones (distribuidos en 41 operaciones) que suponen el 87% del importe máximo permitido.
Reforma legal Más ministerios y prohibición de armas
l La Comisión Interministerial (Cifad) seguirá encargada de aprobar los créditos y el destino final de los proyectos.l Presidencia del Gobierno y los Ministerios de Interior, Educación, Ciencia y Tecnología y Fomento entran en la Cifad.l Para atender a Irak y Afganistán, la nueva ley permitirá otorgar donaciones del FAD en circunstancias excepcionales.l El control parlamentario de la actividad del FAD que ya se venía realizando se fija en la nueva norma con rango de ley.l Se prohíbe expresamente el uso del Fondo de Ayuda al Desarrollo para financiar operaciones de material militar.l La selección de los proyectos financiados tendrá en cuenta las necesidades y objetivos señalados por el país receptor.
Sanciones y una cláusula anticorrupción
La nueva Ley del FAD incorpora también una cláusula anticorrupción y un código de comportamiento que deberán cumplir las empresas que realicen proyectos financiados por el Fondo de Ayuda al Desarrollo. Entre los requisitos exigidos destaca la obligatoriedad de que todas las empresas beneficiarias de los créditos, sean españolas o no, cumplan todos los requisitos necesarios para poder contratar con la Administración española.Con objeto de aumentar la calidad y la eficacia de los proyectos financiados, la Secretaría de Estado de Comercio desarrollará mecanismos para realizar una evaluación y seguimiento anual, y se exigirá también a las empresas adjudicatarias que firmen una declaración anticorrupción y un compromiso de no realizar 'pagos ilícitos'.Finalmente, para garantizar aún más la transparencia y la legalidad de los contratos se crea un procedimiento sancionador por el que las empresas que incumplan las condiciones establecidas serán apartadas del acceso a este instrumento financiero.