Japón recupera el interés de los inversores tras años de ostracismo
Los sectores más interesantes son los de alta tecnología, automóviles, finanzas y farmacéutico
El Ministerio de Economía y Finanzas de Japón lo confirmó la semana pasada en un comunicado: 'La economía se está recuperando. Hemos mejorado nuestras perspectivas porque la inversión y los beneficios corporativos se están fortaleciendo y la producción industrial se recupera'.
El Gobierno espera que el PIB cierre el año fiscal 2003 con un crecimiento en términos reales del 2%, el mayor desde 1996. Su visión optimista es confirmada por los expertos. 'Las empresas japonesas están registrando unos beneficios mayores a los de 2000. Es factible que el Nikkei llegue hasta 20.000 puntos actualmente ronda los 9.900 puntos en dos o tres años', afirma Masanori Hoshina, de BNP Paribas.
'Llaman la atención el aumento del 4% en el flujo de caja libre de las empresas, la mejora de la inflación subyacente y el saneamiento del sistema bancario', apunta Miguel Ángel Martín, director de inversores de la gestora de grandes patrimonios de Deutsche Bank, que prevé un crecimiento del 2,6% en 2003 y del 1,9% para 2004.
El mercado espera que los beneficios corporativos después de impuestos arrojen un crecimiento anual del 107% al cierre del ejercicio fiscal 2003, en marzo de 2004.
Pero todas las expectativas tan brillantes pueden venirse abajo si persiste la fortaleza del yen. Un dólar cotiza a 108,8 yenes, un 10% menos que enero. Aún así, la moneda aún no ha llegado al nivel de alarma: 'Si el dólar baja a niveles de 105 yenes, las empresas sufrirán', prevé la gestora de Goldman Sachs.
El mantenimiento de la moneda a niveles moderados se logra a un alto coste. El Banco de Japón ha batido ya su récord vendiendo este año 16,2 billones de yenes.
Estrategia en EE UU
Los japoneses son los primeros compradores de activos estadounidenses. Las compras netas de valores en dólares fueron en septiembre de 19.600 millones (16.500 millones de euros), la cifra más alta en cuatro meses.
Japón es el mayor financiador de los déficit, público y por cuenta corriente, de EE UU. Pero no es sólo una estrategia para el yen. 'Mientras los tipos de interés locales permanezcan cerca del 0%, Japón no tiene otra alternativa que seguir invirtiendo en bonos estadounidenses', explica Hoshina.
La política soterrada de un dólar débil que lleva a cabo la Administración Bush amenaza con alterar esta tendencia. 'La Bolsa de EE UU está demasiado cara como para ser atractiva. Si la debilidad del dólar persiste, Japón va a exigir a EE UU tipos más altos para seguir invirtiendo', advierte Antonio Villaroya, de Merrill Lynch.
Los riesgos del auge del yen para las exportaciones no impide que los analistas vean positivo invertir en Japón. La tecnología de alto valor añadido es la preferida por los expertos, pero hay más oportunidades. 'Sobreponderamos el sector financiero porque está cumpliendo los objetivos de venta', sugiere Sasha Evers, de Mellon Invesment. 'En automóviles lo están haciendo muy bien, ganando cuota de mercado en EE UU', apunta Martín. 'El sector farmacéutico es interesante. La salud va a ser el tema en Japón, la esperanza de vida es de 80 años, la mayor del mundo', destaca BNP Paribas.
Ante la euforia, Schroders recuerda que, aunque su perspectiva sobre la renta variable nipona es 'positiva', la realidad es que no espera crecimiento nominal del PIB en los próximos dos años.
Los puntos débiles de la economía del Sol Naciente
El factor Koizumi La reelección del primer ministro, Junichiro Koizumi, ha coincidido con el descenso en picado de la Bolsa japonesa. El índice Nikkei ha caído un 6,5% desde que el dirigente de 61 años ganó las legislativas el pasado 9 de noviembre. Los inversores temen que el respaldo entregado que Koizumi profesa a George Bush ponga a Japón en el punto de mira del terrorismo internacional.Créditos morosos moody's advierte que el sector bancario aún 'no está capacitado para canalizar la inversión'. Los datos de la agencia nacional de servicios financieros reflejan que el porcentaje de créditos incobrables es aún superior al 7%, 'igual que en los últimos tres años'. Deshacerse de estos créditos supondría una destrucción de 600.000 empleos, un coste visto como 'aceptable' por Moody's.DeflaciónEl descenso del IPC fue en octubre del 0,2% en tasa interanual, una de las tasas más bajas en años. Se habla ya de 'punto de inflexión'. Pero Standard & Poor's señala que 'cualquier cambio de tendencia se dará de forma muy lenta' y que la caída de precios no sólo se debe a la debilidad del consumo, sino también a rigideces del mercado que 'impiden la salida de empresas insolventes'.ExportacionesEl superávit comercial creció un 20,4% en octubre en tasa interanual. Así, la demanda externa representó un tercio del crecimiento del 0,6% que experimentó el PIB en el tercer trimestre. La otra cara es la dependencia del comercio, avisa ABN Amro: 'Un crecimiento vacilante de EE UU limitará la capacidad de exportación y una desaceleración china causaría serios problemas'.Mercado laboralLA persistencia durante más de dos años de tasas de desempleo por encima del 5% es uno de los mayores obstáculos para la recuperación. El gasto de los consumidores representa más del 50% del PIB nipón y la mala coyuntura del mercado laboral hace mella en la confianza de los consumidores que, ante los nubarrones, optan por el ahorro. Así, el gasto de los hogares cayó en septiembre un 0,9%.