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Europa

Los mercados cotizan las buenas noticias de EE UU

Las principales plazas europeas se apuntaron esta semana importantes ganancias, siguiendo la estela de la recuperación estadounidense. Salvo el Ibex, los grandes índices europeos cerraron el viernes con un nuevo máximo anual. Fráncfort ha empezado esta semana a cerrar a las 17.30 horas, como el resto de Europa. El cambio le ha dado suerte y le ha permitido cerrar el conjunto de cinco sesiones con un alza del 3,46%; París ganó el 2,37% y Londres se revalorizó un 2,08%.

La confirmación de que el mercado laboral estadounidense está creando empleo eleva las expectativas para las exportadoras europeas. Ante la debilidad del consumo doméstico, las esperanzas se centran en las compras procedentes del otro lado del Atlántico.

Es el caso de Aegon, la tercera aseguradora de Europa, subió ayer un 2,59%. La compañía recibe un 60% de sus ingresos de EE UU. Siemens, que hace un 25% de sus ventas en EE UU, subió un 1,96%.

Varias exportadoras han experimento buenas ganancias a la mejora de expectativas. Nokia, líder mundial en la fabricación de móviles, avanzó ayer un 1,47% y acumula una revalorización del 4,15% en cinco sesiones, ante la expectativa de un crecimiento de sus ventas. Sage, líder británico en la fabricación de software de contabilidad, también se beneficio del nuevo entorno optimista y consiguió subir ayer un 3,26%.

No todas las buenas noticias vienen del gigante estadounidense. La compañía holandesa de distribución Ahold se revalorizó un 1,76% tras anunciar un aumento de los beneficios netos de 60 millones de euros, frente a los 142 millones de pérdidas del mismo periodo del año anterior. La distribuidora anunció, además, una ampliación de capital de 2.500 millones de euros.

El anuncio de reestructuración da resultados a Bayer

La firma de Leverkusen fue ayer la estrella en el Dax de Fráncfort con una subida del 6,9%, tras anunciar la segregación de sus divisiones de química y plásticos para agruparlas en una nueva empresa que saldrá a Bolsa en 2005. La reestructuración permitirá a la compañía ahorrarse 1.000 despidos. Bajo el nombre tradicional quedarán los sectores farmacéutico, alimentación y materiales nobles. Los inversores premiaron la apuesta de Bayer de centrarse en los medicamentos.

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