Duelo europeo en la fiesta de Seve
Hoy comienza en el campo del Parador de El Saler (Valencia) la tercera edición del Seve Trophy, una Ryder Cup a la europea que al igual que su hermano mayor cuenta con dos equipos. Severiano Ballesteros y Colin Montgomerie son los capitanes de Europa continental y de Gran Bretaña e Irlanda, respectivamente. La Comunidad Valenciana, patrocinadora de esta edición, reúne a los mejores jugadores del PGA European Tour, entre los cuales hay cuatro españoles.
Seve Ballesteros es el impulsor de este torneo que lleva su nombre y que el año 2000 se jugó en Sunningdale (Inglaterra) con victoria de los jugadores continentales (13-12), mientras que el equipo de Gran Bretaña e Irlanda se impuso por 14 a 11 en la segunda que se celebró en Druids Glen (Irlanda).
En 1979 Severiano fue integrante del primer equipo europeo de la Ryder Cup, que incluyó miembros de la Europa continental. Un par de años antes, Jack Nicklaus declaró que el duelo entre Gran Bretaña e Irlanda contra Estados Unidos no tenía razón de existir y es que los americanos arrasaban un año sí y otro también. El Oso Dorado fue quien propuso la entrada de otros jugadores, como Seve, para reforzar a un equipo que sucumbía ante el juego americano.
Tras los éxitos en la Ryder, el golfista cántabro apostó por lanzar su propio torneo, una idea que tuvo un precedente entre 1974 y 1984 con la denominada Hennessy Cup, que precisamente comenzó en Sotogrande (Cádiz), muy cerca del campo de Valderrama, donde Ballesteros, en 1997, consiguió uno de los éxitos más importantes de la historia del deporte español: traer la Ryder a España.
El sistema de clasificación para el Seve Trophy es estricto. Cada equipo lo componen el capitán, los cuatro primeros jugadores que cada uno tiene en los primeros puestos de la clasificación mundial, los cuatro mejores de la Orden de Mérito Europea y un jugador elegido por cada capitán y que este año han sido José María Olazábal y Paul Lawrie. Tanto el vasco como Miguel Ángel Jiménez han participado en todas las ediciones. Sergio García, baja en Druids Glen tras mantener una discusión con Ballesteros, regresa al equipo en el que debuta Ignacio Garrido.
Uno de los mayores atractivos de la competición lo constituye el enfrentamiento directo de los dos capitanes en la última jornada. Un mano a mano entre Montgomerie y Ballesteros que en las dos ediciones anteriores se ha resuelto a favor del de Pedreña, que reconoce que apenas ha podido practicar para repetir el resultado: 'Tengo la espalda destrozada y entreno menos que antes, no sé lo que ocurrirá, pero intentaré mantener mi ventaja sobre Monty', dice Seve, ilusionado con su fiesta.
Sabotaje en los greens del Saler
Hace tres semanas que los greens de los hoyos 15, 16 y 17 del campo del Parador del Saler fueron objeto de un sabotaje. Alguien los atacó para dañar la hierba. El caso fue denunciado a la policía. El director del campo, Paco Contreras, explicó que habían trabajado siguiendo las instrucciones de Richard Stillwell, cuidador jefe de greens de la PGA European Tour, que dejó aquí a un miembro de su equipo. 'Nos harían falta tres semanas para que los greens estuviesen perfectos, pero no se va a notar la diferencia en el rodar de la bola. Se están segando a tres milímetros, con posibilidad de hacerlo a 2,6 mm', dijo. Un dispositivo de seguridad se encarga de vigilar el campo para disuadir nuevos intentos de sabotaje.