La ayuda fiscal a la actividad se estanca
El Estado gasta cada vez más dinero en políticas asistenciales y menos en fomento de la actividad económica, a juzgar por la evolución que han experimentado en los últimos años las partidas de gastos fiscales (reducciones de los ingresos aportados por los contribuyentes) en los últimos años.
Las dos reformas fiscales aplicadas por el Gobierno -en 1999 y 2003- han provocado un desplazamiento paulatino de los beneficios fiscales (desgravaciones en los impuestos) hacia las políticas de protección a la familia y reducciones directas de la renta salarial gravable.
Estas políticas, junto con las ayudas al consumo sanitario y la bonificación por la adquisición de vivienda (creciente en términos absolutos, pero estable en términos relativos en torno al 15% del total de ayudas fiscales), supondrán en 2004 un 40,91% del total del recorte de impuestos.
Hace tan sólo siete años, en el presupuesto de 1997, sólo absorbían el 36,92% de los recursos articulados por esa vía a las políticas de carácter asistencial.
La reducción de ingresos tributarios provocada por las iniciativas de fomento de la actividad económica o el ahorro (disposición de inversión futura), por su parte, aunque absorben más proporción y más dinero, está estancada en los últimos años; incluso desde 2000 a 2004 se produce una reducción significativa, pues pasa del 53,61% de los beneficios fiscales (esa es la terminología que utiliza la Administración en los presupuestos) al 45,56%, ligeramente inferior a la dedicada en 1997, primer presupuesto elaborado íntegramente por el Partido Popular.
Lógicamente bajo el epígrafe de fomento de actividades se encuadran programas públicos de desfiscalización de algunas actividades como la agrícola o los transportes, en los que el impuesto bonificado hasta su eliminación es muchas veces el impuesto sobre el valor añadido. Ha tomado un peso relevante en los últimos años la reducción de ingresos públicos en el comercio, turismo y pymes, que absorbe casi el 14% del total del gasto fiscal y llega a los 5.300 millones de euros en 2004.
Las ayudas fiscales recogidas en el presupuesto del Estado de 2004 (reducciones de los ingresos aportados por los contribuyentes) llegarán a 37.931 millones de euros, un 27% del total de ingresos tributarios estimados, y poco más del 17,4% de los recursos públicos consolidados. Su crecimiento en los últimos años ha sido mucho más acelerado que el propio presupuesto: mientras que los gastos fiscales han experimentado un crecimiento del 65% en los últimos siete años, los recursos consolidados del Estado, organismos autónomos y Seguridad Social han crecido un 56%, y los ingresos tributarios sólo un 32,5%. Las partidas de las ayudas establecidas en el presupuesto son una minoración de ingresos muy difíciles de reducir o eliminar una vez que se ponen en marcha.
Reparto en todos los impuestos
1. Las bonificaciones fiscales a la actividad se concentran en el impuesto sobre sociedades, pero salvo la deducción por reinversión de beneficios extraordinarios, con un montante de 938 millones de euros previstos para 2004, el resto de las partidas son muy limitadas, ya que prácticamente ninguna llega al 1% del total de gastos fiscales del ejercicio. Sólo el programa de tipos especiales para pymes llega al 1,43% del total de ayudas fiscales.2. Las ayudas a la investigación, desarrollo e innovación tecnológica sólo suponen 159,96 millones de euros, el 0,42% del total de gastos; a nuevas tecnologías de la información y comunicaciones dedica el presupuesto exenciones por valor de 6,14 millones de euros (el 0,02% del total). Todas estas deducciones están en el impuesto sobre beneficios de sociedades.3. En los impuestos especiales las ayudas llegan a 1.206 millones de euros, mayoritariamente concentrados en la accisa de hidrocarburos, tanto por la vía de exenciones como de aplicación de tipos reducidos. Una de las partidas más voluminosas de las exenciones está en el IVA, con 18.202 millones de euros, por la aplicación de tipos reducidos o superreducidos; las exenciones reales son 6.065 millones de euros en 2004, y se centran en educación, sanidad y asistencia social.4. Los no residentes están exentos de los rendimientos de los bonos y obligaciones del Estado, con un importe calculado de 659 millones de euros; además, todavía hay una partida en el presupuesto de gastos fiscales con exención de 36 millones de euros por rendimientos de los bonos matador.
Programas. Los cuatro principales viviendapensionesInversionesprotección familiar
cantidad Más de 5.517,4 millones de euros, el 14,55 del total, y con un crecimiento del 15,22% sobre el gasto en 2003 (729 millones de euros más).impuesto La deducción se practica en la cuota del impuesto sobre la renta por una cantidad máxima de 9.000 euros por declaración individual y 18.000 euros en la conjunta, y se puede sumar tanto la amortización de capital como los intereses pagados en el ejercicio.cantidad 1.486 millones de euros se destinan a desgravar por la capitalización de fondos de pensiones, casi un 4% del total del gasto fiscal del Estado. En 2003 se presupuestó la misma cantidad, que supone un 4,18% del beneficio fiscal.impuesto La mayoría de la deducción está en la minoración de la base en IRPF por una cantidad de hasta 7.200 euros (8.000 en 2004); hay otra deducción en sociedades para las empresas con aportación.cantidad El fomento de las inversiones superó los 6.000 millones de euros (6.044), casi un 16% del total para el ejercicio de 2004, frente a 5.208 millones de euros en el año vigente.impuesto Las deducciones están alojadas mayoritariamente en el impuesto de sociedades, con una reducción de ingresos de 3.640 millones de euros. La partida más voluminosa es la deducción por reinversión de beneficios extras, con 938 millones de euros.cantidad Gasto de 2.504 millones de euros en deducciones en el IRPF. En 2003 llegará a 2.120,4 millones de euros.impuesto La principal partida es la derivada de la tributación conjunta de las unidades familiares (1.880 millones), a los que hay que sumar las deducciones familiares por hijo, las deducciones por maternidad (583 millones de euros), y las dedicadas al cuidado de los hijos menores de 3 años, con un coste de 151 millones al año.
Poco estímulo al ahorro
El estímulo fiscal al ahorro, contabilizando también la partida destinada a reducción de la base imponible por la capitalización de fondos de pensiones, supondrá 1.944,9 millones de euros en 2004, sólo el 5,13% de los gastos fiscales. En el año 2000 llegaba al 9,06% y en 1997, al 9,26%. El respaldo a los fondos de pensiones ha crecido (casi duplicado en siete años), pero se ha contraído el resto de subvenciones a los impuestos sobre el capital.